Paso Los Libertadores, una carretera en los Andes con 29 curvas en zigzag

Aquellos que sufran de mareos en las carreteras de montaña o que acusen excesivamente los caminos con curvas tendrán que elegir un punto diferente al Paso Internacional Los Libertadores a la hora de cruzar con su vehículo entre Chile y Argentina. Y es que este lugar en plena cordillera de los Andes, a 3.175 metros sobre el nivel del mar, no es apto para ellos.

La ruta comienza a aproximadamente 70 kilómetros de la capital chilena, a 50 km. de las cumbres de los Andes y de la frontera argentina, si se quiere partir en dirección este. Al poco, comenzarán unas curvas zigzagueantes, muy cerradas pero con la anchura suficiente para permitir el paso de camiones de mercancías, que son los que suelen utilizar sobre todo este camino.

Al mismo tiempo que vamos realizando un camino que a muchos les recuerda al cuerpo de una serpiente deslizándose por el desierto, evitando quemarse con la arena, no dejaremos de subir metros. La pendiente es abismal. Solo en las primeras 20 de las 29 curvas en zigzag habremos ascendido casi 300 metros de altura, y todo ello en apenas 4 kilómetros.

Las siguientes nueve lo harán hasta 2.800 metros sobre el nivel del mar, y aún estaremos a 5 km. del puesto fronterizo y a 7 de la cumbre, que se encuentra en Argentina. En territorio de este último país está también el túnel del Cristo Redentor, nombre por el que también se conoce al Paso Los Libertadores. Cerrado durante el invierno austral por las intensas nevadas que suelen sucederse en los Andes, colapsando la entrada y la salida del túnel, es uno de los más largos de Sudamérica, con más de 3 kilómetros de largo, y fue construido en 1.980.

Su nombre se debe a la estatua de Cristo Redentor con cuya inauguración quisieron simbolizar ambos países el final de sus disputas fronterizas. En la parte argentina no hay tanta curva y el desnivel es más suave, de ahí que haya más turistas subiendo desde ese país para ver la escultura. La ciudad de Mendoza no queda demasiado lejos, por lo que es una buena excursión desde su centro urbano si estamos en ella durante algunos días de vacaciones.

No es el único paso entre ambos países que se puede recorrer en la zona. Una alternativa que cada vez está teniendo más peso al de Los Libertadores es el de Agua Negra. Este, además, se encuentra a aún más altura, marcando 4.780 metros sobre el nivel de mar y con una frontera bastante escueta, con dos postes de hierro que se encargan de sostener un cartel indicando el cambio de país.

También allí se está proyectando la construcción del túnel Agua Negra, que dará mucha vida a la provincia de Elqui, en Chile, y que será el culmen de un corredor bioceánico que una Porto Alegre y Coquimbo, dando salida rápida a mercancías de Argentina, Brasil y Uruguay al Pacífico.

Eso sí, aunque no sea el más elevado, no podrá compararse con las impactantes imágenes de grandes trailers de mercancías, así como temerarios ciclistas en grupo o en solitario que se marcan como objetivo hacer, una a una, durante más de 40 kilómetros, las 29 curvas más zigzagueantes de América Latina, las mismas que permitirán maravillarse, una vez más, con la imponencia de los Andes.

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