¿Qué es el turismo de guerra?

¿Has oído hablar alguna vez del turismo de guerra? Sabemos que cada viajero tiene unas motivaciones para desplazarse a un destino concreto, que algunos buscan sumergirse en los episodios más interesantes de nuestra historia, otros apuestan por probar los alimentos más maravillosos y exclusivos de nuestro planeta y otros, simplemente, desean conocer rincones completamente diferentes y empaparse de sus culturas. Pues bien, aunque te parezca una absoluta locura, también hay quien sueña con meterse de lleno en el campo de batalla, en esos lugares que están siendo azotados por la guerra y por diferentes tipos de conflicto. Y son ellos los que han provocado el nacimiento de este turismo de guerra.

Viajeros que se han cansado de ver la realidad en las noticias y que, además, parecen no tenerle miedo a nada. Personas de todos los rincones del mundo que sueñan con desplazarse a aquellos países que se encuentran en pleno conflicto armado, para contemplar en primera persona el horror de la guerra, para vivir todo lo que ya han visto a través de los telediarios y para contemplar lo mucho que no nos enseñan. Unos por morbo, otros porque simplemente quieren vivir una aventura al límite y otros porque realmente quieren saber algo más y quieren rozar ese horror que les atormenta en la distancia, para valorar más lo que tenemos, para entender lo que están viviendo millones de personas.

Suena a locura, pero lo cierto es que existen diferentes agencias en el mundo que se han especializado en este turismo de guerra. Agencias que ofrecen paquetes ‘vacacionales’ a lugares como Siria y que, además, también pueden organizar viajes más personalizados. Mientras que algunos se dedican a buscar el crucero perfecto, el paquete para ir a los parques temáticos de Orlando o la mejor oferta para volar a Nueva York, hay quien escoge el destino de su siguiente viaje en la sección de Internacional del periódico. Por increíble que parezca, mientras que quien las viven huyen de las guerras, hay muchos viajeros que las buscan, por diferentes motivos, y que ya no saben ni quieren disfrutar de otro turismo.

No pienses que estos viajes te llevarán a la zona más pacífica del país, ni que pasarás tus días en resorts de lujo alejado del centro del conflicto. Lo cierto es que el turismo de guerra te lleva de lleno a las zonas que están siendo más castigadas, a esos lugares que han sido o están siendo arrasados, donde en muchos casos ni siquiera quedan civiles. El turismo de guerra te muestra la guerra tal y como es y, por supuesto, conlleva sus riesgos. Unos riesgos que muchos viajeros están dispuestos a correr, siempre y cuando su viaje les devuelva adrenalina, enseñanzas y una experiencia que no es comparable con nada.

Como imaginarás, este tipo de turismo es uno de los más polémicos que existen, ya que llega a suponer incluso una cuestión ética para muchos. ¿Pueden las guerras llegar a ser realmente algo atractivo? ¿Nos hemos deshumanizado tanto que podemos incluso viajar a una zona de conflicto a hacer fotos, sin que se nos remueva algo por dentro? Es evidente que hay quien viaja allí y busca ayudar, pero también es cierto que otros muchos turistas hacen exactamente lo mismo en su viaje a Siria que cuando estuvieron en Nueva York: disfrutar, hacer fotos, pasárselo bien… ¿Hasta dónde va a llegar el ser humano?