Rothenburg, el precioso pueblo que inspiró la versión Disney de Pinocho

Alrededor del mundo hay muchos pueblos de esos que se dice que parecen sacados de un cuento. Pero lo cierto es que también hay veces en que es justo al contrario y son los pueblos los que inspiran a los autores de las obras literarias. En esta ocasión en concreto, en realidad, una película. Porque eso es lo que ocurrió con Rothenburg, un pintoresco pueblo alemán: inspiró la versión Disney de Pinocho.

Debes saber que no es de extrañar que esto fuese así, porque si bien Alemania cuenta con muchos rincones de ensueño, Rothenburg es uno desus pueblos más fascinantes. Situado en el estado de Baviera, este municipio se sitúa en lo alto de una plataforma junto al río Tauber. Pero si por algo Rothenburg es conocido alrededor del mundo no es por ese detalle sino por lo bonito que es su casco histórico.

Este cuenta con una arquitectura medieval muy bien conservada, las calles están adoquinadas y las casas son coloridas y tienen entramados de madera. Paseando por allí, el visitante se encuentra con plazas hechizantes que desprenden encanto las mires por donde las mires. Pero también edificios concretos como el del Ayuntamiento, que se construyó en el año 1250 y que cuenta con una torre desde la que se obtienen unas bellas vistas de Rothenburg cuando se accede a su zona más alta.

Otro de los atractivos de esta localidad alemana es su fuente de San Jorge, situada en la Marktplatz. Sobre ella podemos decir que contiene 100 mil litros de agua y que está decorada con una columna que lleva la imagen de San Jorge montado a caballo. Pero no solo eso, sino que debes saber que en Disney World de Orlando, en concreto en su pabellón alemán, hay una reproducción de dicha estatua.

Por otro lado, de Rothenburg también podemos destacar un edificio llamado Fleisch- und Tanzhaus, que se encuentra justo detrás de la fuente de la que acabamos de hablar y que llama la atención con su vivo color rojo. Y una farmacia que hay al lado, la Marienapotheke, que data del año 1448.

Además de esto, el viajero que llega a Rothenburg tampoco puede marcharse del lugar sin visitar la Casa Staudt, que se encuentra en el número 18 de la Herrngasse. Se trata de un famoso bulevar de la ciudad pero también de la que ostenta el 'título' de casa noble más antigua de Rothenburg sin restaurar.

Pero como siempre decimos en estos casos, lo que realmente resulta imprescindible es callejear sin rumbo, admirando cada uno de sus detalles. Las fachadas, las puertas y ventanas, sus decoraciones, las tiendas, los bancos, las plazas. Puede que a ti Rothenburg no te inspire para crear ninguna película como le ocurrió a Disney con Pinocho, pero pese a eso hay algo claro: formará parte para siempre de tus mejores recuerdos viajeros.