Arquitectura religiosa
Una ruta por las catedrales góticas más bellas de España
Tantos siglos de tradición cristiana y católica en la península Ibérica han dejado una gran herencia artística y cultural. Verdaderas obras de arte gótico se levantan en los cascos más antiguos de muchas ciudades españolas. Te invitamos a admires sus vidrieras, arcos de medio punto, altares…
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Catedral de León
Este edificio gótico se comenzó a construir en el año 1205 bajo durante el reinado de Alfonso X de Castilla, conocido también como “el sabio”. En esta catedral se encuentran las vidrieras de mayor calidad de la península, y con la luz que crean en el interior se pretende recrear el Jerusalén Celeste. Es la catedral más clásica y sigue el modelo francés, tiene arbotantes dobles. Se la conoce con el sobrenombre de Pulchra leonina, que significa Bella Leonesa, y se encuentra en pleno Camino de Santiago.
Catedral de Burgos
Sin salir de Castilla y León, llegamos a otra de las urbes más relevantes en el gótico castellano. La Santa Iglesia Catedral Basílica Metropolitana de Santa María de Burgos, se comenzó a construir en el año 1221, siguiendo el modelo gótico francés. En su interior conviven diferentes estilos artísticos, desde el Gótico, hasta el Barroco, pasando por el Renacimiento. Esta catedral ha sufrido diferentes modificaciones en los siglos siguientes al de su construcción. La última es del siglo XVIII, del que datan la sacristía, la capilla de santa Tecla, y las portadas góticas de la fachada principal.
Catedral Santa María de Gerona
Esta catedral se encuentra en el punto más alto de la ciudad. Aunque no es completamente gótica, pues se empezó a construir el siglo xi en estilo románico, y conserva el claustro y la torre de dicho estilo, es un referente del gótico aragonés. Cuenta con la nave gótica más ancha del mundo, con una anchura de casi 23 metros. Se terminó de construir en el siglo XVIII. A muchos les resultará familiar, pues aparece en la popular serie Juego de Tronos, como la sede religiosa del “Septum”.
La catedral del Mar en Barcelona
Aunque popularmente se la conoce así, es la Basílica de Santa María del Mar. Se encuentra en el barrio de Ribera de la capital catalana. Lo destacable de esta construcción, es que fue sufragada por los feligreses del puerto y de la Ribera, con su dinero o trabajo. En ella se pueden identificar rasgos del gótico catalán, como sus torres octogonales, abundancia de superficies desnudas y contrafuertes macizos. Es un edificio de tres naves formadas por cuatro tramos y el presbiterio consta de medio tramo. En contraste con la austeridad de sus paredes, están las grandes vidrieras que llenan la basílica de vivos colores.
Catedral de Valencia
La Iglesia Catedral-Basílica Metropolitana de la Asunción de Nuestra Señora de Valencia, se construyó en el siglo XIII, y siguiendo la tradición de ese siglo se consagró a la Asunción de María. Aunque en esta edificación predomina el gótico valenciano, conviven muchos otros estilos como el románico, el gótico francés, el renacimiento, el barroco y neoclásico. En su interior podremos disfrutar de las primeras y mejores pinturas del Quattrocento de toda la Península Ibérica. El cimborrio sigue el estilo francés, pues está formado por prisma octogonal con ocho vidrieras en cada lado.
Catedral de Toledo
Regresamos al gótico castellano con la catedral de Santa María de Toledo, su construcción comenzó en el año 1226 bajo el reinado de Fernando III. Los últimos toques a esta catedral se dieron en el siglo XV bajo la gracia de los Reyes Católicos. El material que se utilizó fue piedra blanca de Olihuelas. En Toledo se la conoce como Dives Toletana (con el sentido de la rica toledana). Mide 120 metros de longitud por 59 metros de ancho. Consta de cinco naves más crucero y doble girola. El edificio tiene una gran influencia del gótico francés del siglo XIII, y bien adaptado al gótico castellano.
Catedral de Sigüenza
Está dedicada a Santa María la Mayor, patrona de la ciudad. Su construcción duró casi dos siglos (1144-1326), y mezcla los estilos románico y gótico. Por ejemplo, la fachada principal es románica, aunque posteriormente se fueron añadiendo detalles neoclásicos y barrocos. El edificio consta de tres naves, divididas por dos contrafuertes. La transición al gótico de esta obra se puede ver en sobre los ventanales de las puertas laterales y sobre el rosetón, pues veremos tres arcos apuntados, y ojivales.
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