VENECIA
Todo lo que debes saber de la basílica de San Marcos, el templo más famoso de Venecia
La basílica de San Marcos es uno de los imprescindibles en un viaje a Venecia. Te contamos todo lo que has de saber de ella y te proporcionamos algunos consejos básicos a tener en cuenta antes de visitarla.
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Venecia es una ciudad repleta de islas, canales y puentes. Quienes deciden visitarla lo hacen principalmente llamados por esos elementos, que son los que la convierten en un destino diferente. Pero además, en Venecia hay otros lugares que merece la pena conocer, como por ejemplo su basílica de San Marcos. Un templo católico del que te vamos a contar a continuación todo lo que debes saber.
Para empezar, diremos que la basílica de San Marcos de Venecia está situada en una plaza que lleva su mismo nombre. Allí se levanta imponente, presidiendo el lugar, presumiendo de ser no solamente el templo católico más importante de Venecia sino también la principal obra arquitectónica bizantina del Véneto.
Sobre la basílica de San Marcos, además, tienes que saber que está considerada también catedral e iglesia patriarcal. Y que se construyó entre los años 828 y 832 con la finalidad de que se guardaran en su interior ciertas reliquias de San Marcos el Evangelista que, presuntamente, fueron robadas en Alejandría.
Pero la catedral que podemos ver hoy en día no es la misma que se levantó hace más de un milenio. En el año 975 la basílica ardió en un incendio producido durante un motín, por lo que tuvo que ser reconstruida más tarde. De hecho, fue en el año 1063 cuando se empezó la restauración de la basílica que ha llegado hasta la actualidad, aunque ha sufrido cambios con el paso de los siglos.
Unos cambios que los viajeros pueden ver cuando se acercan hasta esta obra arquitectónica cuya fachada blanca está repleta de nichos, capiteles, columnas, arcos, adornos y mosaicos de oro. En cuanto a los materiales, has de saber que la basílica de San Marcos de Venecia presenta una construcción hecha especialmente a base de ladrillos, aunque están recubiertos de mármol y bronce, además de con esculturas.
Otro dato a tener en cuenta es que para visitarla puedes hacerlo de varias formas. Entrar a la catedral es gratuito, pero has de pagar si quieres ver algunas zonas como su museo. Pero para entrar, de todos modos, tendrás que hacer cola. Algo que puedes evitar si compras una entrada bastante económica por Internet. Además, puedes optar por hacer una visita guiada para aprender mucho más sobre este lugar imprescindible en un itinerario para cualquier viajero que quiere conocer la ciudad.
Para acabar, debes tener en cuenta otros aspectos antes de visitar la catedral de Venecia. Por ejemplo, que en principio no se puede acceder al interior con pantalones cortos o con los hombros descubiertos. Tampoco se pueden entrar grandes mochilas, por lo que si llevas una tendrás que dejarla en una taquilla. Ni hacer fotos dentro; solamente podrás sacar la cámara cuando llegues a su mirador.
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