Todo lo que tienes que saber sobre el conocido Moulin Rouge de París

Cuando uno prepara un viaje a París, hay varios monumentos y lugares que sabe de antemano que tiene que visitar. La torre Eiffel, por supuesto, encabeza la lista. Pero hay otros también muy populares como el Museo del Louvre, la catedral de Notre Dame y, claro está, el Moulin Rouge.

¿Quién no ha visto alguna vez una imagen del molino rojo que encontramos a los pies de la colina de Montmartre? Es un clásico que aparece en multitud de postales, fotografías o películas de televisión. Pero pese a su popularidad, la mayoría de personas lo visitan sin saber apenas nada sobre este símbolo parisino.

Esto es así incluso a pesar de la gran cantidad de espectadores que acoge cada año, pues son más de 600.000 personas las que de manera anual deciden asistir a algún show. Unos espectadores de lo más variados, cabe decir, pues el Moulin Rouge se diseñó con una decoración atípica y extravagante para atraer a ciudadanos de todas las clases. Así, por allí han pasado trabajadores, turistas, empresarios e incluso burgueses.

No obstante, hubo una temporada en la que nadie pudo acceder al recinto, puesto que un incendio producido en el año 1915 mantuvo el Moulin Rouge cerrado durante nada más y nada menos que seis años. Ese fue el tiempo que tardó en reconstruirse y después de la Primera Guerra Mundial volvió a abrir sus puertas.

Además de estos datos, es posible que haya otros que tampoco conozcas sobre este símbolo de la capital de Francia. Por ejemplo, que el Moulin Rouge inventó el cancán francés, un baile típico que simboliza las alegrías de la Belle Époque en la que se construyó el cabaré.

Aparte de esto, debes saber que el Moulin Rouge es un lugar de récord. De hecho, apareció en el libro de los récords Guinness gracias a sus bailarinas, que lograron levantar las piernas un total de 29 veces en tan solo medio minuto durante el 125º aniversario del cabaré.

Dicho todo esto, ahora podrás visitar el Moulin Rouge durante tu viaje a París conociendo mucho mejor este edificio histórico. Así, podrás verlo con otros ojos cuando decidas meterte en su interior o simplemente contemplar lo estrafalario que es por fuera.