Una bella escapada europea
Viaja por Suiza a través de sus lagos
Sin lugar a duda, Suiza es uno de los países que cuenta con los paisajes más bonitos e impresionantes del mundo, casi todo ahí es pura naturaleza. Por ello, hemos tenido una idea para que conozcáis el país y disfrutéis de una de las cosas más maravillosas que tiene: sus lagos.
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Suiza te conquistará desde el primer momento. No podrás olvidar sus paisajes alpinos, sus prados completamente verdes, ciudades de época medieval, pueblos que parecen sacados de cuento y, por supuesto, sus lagos de agua cristalina y la paz que reina alrededor de ellos.
Si aún no has visitado el país pero está en tu lista de deseos, después de este artículo, las ganas serán aún mayores. Por supuesto que sus ciudades merecen la pena ser visitadas y como sabemos que no simplemente viajaréis de lago en lago, os traemos aquellos que no os podéis perder para que así planifiquéis vuestro viaje a raíz de esto. Allá vamos:
Lago Lemán
El lago Lemán, también conocido como lago de Ginebra, tiene una peculiaridad y es que pertenece tanto a Suiza como a Francia (dos tercios al primero, uno para el segundo). Es el más grande y posee la mayor cantidad de agua de toda Europa Central. En él circulan varios buques que conectan los diversos pueblos entre sí, además de la cantidad de hoteles que lo rodean. Cuenta con numerosos atractivos turísticos, como por ejemplo el Jet d’eau, un chorro de agua que alcanza los 140 metros de altura.
Lago Maggiore
Tan solo una pequeña esquina del noreste del lago pertenece a Suiza, puesto que este se extiende hasta el Piamonte y la Lombardía. Es posible recorrerlo en barco y disfrutar así de los magníficos paisajes alpinos que nos ofrece. Si se quiere tener una vista panorámica de él, lo mejor es acceder al mirador de Cardada/Cimetta a través de un teleférico.
Lago de Joux
Se encuentra en el noroeste del cantón de Waadt y tiene una amplitud de 8’77 kilómetros cuadrados. Si ascendemos hasta la cima de Vaulion de Dent, disfrutaremos del paisaje de la mejor manera posible y veremos cómo este lago se extiende 30 kilómetros más. Normalmente queda congelado en invierno, por lo que es una temporada muy bonita para visitarlo y quién sabe, quizás se animan a patinar sobre él.
Lago de Cauma
Muy cercano al pueblo Flims, en el cantón de los Grisones, nos encontramos con este maravilloso lago de agua cristalina. La paz que se respira en él es maravillosa, aunque la entrada no es gratuita pero merece la pena darse un buen chapuzón en él.
Lago de los Cuatro Cantones
Se encuentra en la zona más central del país y cuenta con una superficie de 140 kilómetros cuadrados. Su nombre proviene de los cuatro cantones (Lucerna, Uri, Schwy y Unterwalden) a los que el agua del lago baña sus orillas. A veces podemos encontrar un parecido con los fiordos noruegos, como ocurre con el lago de Uri.
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