Villa Borghese, el pulmón de Roma

El parque de Villa Borghese de Roma se puede comparar con el Hyde Park de Londres o el Central Park de Nueva York. Son equivalentes. Pero hay una gran diferencia entre los tres: los dos últimos son visitas obligatorias para todos aquellos quienes viajan a alguna de las dos ciudades y, en cambio, Villa Borghese es el gran olvidado de la capital italiana. Sin embargo, desde aquí os aseguramos que eliminarlo de la lista de lugares imprescindibles de Roma es un gran error y te contamos todo lo que puedes encontrar en su interior, que es mucho. ¿Quieres saberlo?

Como cualquier parque, en Villa Borghese te encuentras con un montón de plantas y jardines. Los hay de todo tipo, desde italianos hasta ingleses, y algunos de los que tienen más importancia son el Giardino Piazzale Scipione Borghese, el Giardini Segreti, el Parco dei Daini y el Giardino del Lago. Pero sus 80 hectáreas, además de convertirlo en uno de los parques más grande de Europa y en el pulmón de Roma, hacen posible que una vez pasas alguna de las nueve puertas de acceso te encuentres con mucho más que eso.

Así, dentro de este parque que está abierto al público desde 1903 hay una quincena de fuentes y lagos artificiales. Pero también más de treinta monumentos, el zoológico de Roma, pabellones, palacios y museos. Y muchas muestras de la cultura romana.

Entre los elementos a destacar se encuentran el Reloj de Agua de Pincio, que muestra la ingeniería del siglo XIX y se adapta perfectamente al ambiente gracias a su estructura de árbol y sus manecillas que representan flores; el Silvano Toti Globe Theatre, que imita al teatro Shakespeare’s Globe Theatre de Londres; la Fontana dei Cavalli Marini y el zoológico o bioparco, que tiene más de 1000 animales de 200 especies diferentes.

Los museos son un mundo aparte y hay varios que pueden resultar interesantes. El más destacado es quizá la Galería Borghese, considerado uno de los museos de arte más importantes a nivel mundial, y si quieres visitarlo debes comprar entrada anticipada. Pero hay otros como por ejemplo la Villa Giulia o la Galería Nacional de Arte Moderno. Y por si todo esto fuese poco, desde algunos puntos del parque se puede disfrutar de unas vistas maravillosas de la ciudad.

Como ves, además de ser el lugar del que procede buena parte del oxígeno de la ciudad es también un sitio al que se le puede dedicar perfectamente un día entero del viaje –que además sería posible porque abre las 24h–. Porque Villa Borghese suele ser una visita olvidada por los turistas, que en algunos casos ni siquiera saben de su existencia, pero sin duda es un lugar que tiene mucho que ofrecer a los visitantes.