Cambridge, más que una ciudad universitaria

Como Oxford, Cambridge es famosa sobre todo por su Universidad. De hecho tiene una de las universidades más prestigiosas del mundo y, por si eso fuese poco, se puede visitar. Pero aunque ese sea uno de sus imprescindibles, Cambridge tiene más que eso.

Hablamos de una ciudad pequeña, así que es ideal para hacer una escapada de un día desde Londres. Pero las horas en Cambridge se pueden aprovechar muy bien. Así, imaginando que llegas a la ciudad en tren, la primera visita que puedes hacer en esta ciudad de estilo gótico y medieval es la del Cambridge University Botanic Garden. Se trata de unos jardines e invernaderos de más de 15 hectáreas, por lo que se les puede dedicar un buen rato a descubrirlos. Sí, pertenecen a la Universidad, pero son jardines muy bonitos.

Después puedes ir al Sheep’s Green, otro parque muy cercano al anterior. Y desde allí hasta el Mathematical Bridge. Por supuesto, al tratarse de una ciudad universitaria, no puedes dejar de ver su famosa Universidad. Así, algunos de los edificios a los que puedes acercarte son el Newham College, el Selwin College, la biblioteca o el King’s College.

Después y siguiendo por la universidad puedes visitar los parques del Trinity College y otros edificios como la biblioteca Wren hasta llegar, todos alrededor del río Cam. Así hasta llegar al segundo de los puentes más conocidos de esta ciudad inglesa: la réplica del Puente de los Suspiros de Venecia.

Pero el puente no es lo único que recuerda a la bonita ciudad de los canales italiana, sino que también lo hacen los punts. Los punts son unas barcas similares a las góndolas de Venecia y pueden ofrecerte una actividad divertida y diferente que te demostrará que Cambridge es más que su Universidad. Así, puedes alquilar un punt para navegar por tu cuenta o contratar a un profesional que te lleve de paseo por el río.

Para comer, y teniendo en cuenta la zona en la que te encontrarías al seguir la ruta, te proponemos dos opciones: que comas en alguno de los restaurantes de la zona o que compres algo en el Sainsbury’s –uno de los supermercados más conocidos de Inglaterra– y te vayas a hacer un picnic –una de las actividades favoritas de los ingleses– al parque Jesus Green.

Después de comer y de visitar el parque puedes ir a descubrir The Round Church, una iglesia redonda, cuya forma no es muy común en Europa, construida en 1130. Continuando con las iglesias, luego puedes ir a ver la de Great’s St. Mary, cuya gran torre es uno de los símbolos de la ciudad. Y, finalmente, también puedes ir a la iglesia Saint Botolph’s, patrón de los viajeros.

Eso sí, antes de llegar a la última que hemos nombrado, puedes ir a ver el Corpus Clock. Es un reloj de lo más original, pues solamente marca la hora correcta cada cinco minutos. Es decir, quizá cuando lo miras va atrasado o adelantado, pues muestra el caos de la vida.

Para terminar la visita a Cambridge y teniendo en cuenta que es más que una ciudad universitaria, te proponemos que vayas a The Yard, un centro comercial. O, si lo prefieres, puedes optar por ir a tomar algo a alguno de los pubs que encontrarás. ¿No te parece una buena forma de ponerle punto y final a la visita?