MURCIA
Castillo de Monteagudo: su origen y su vinculación con Alfonso X el Sabio
Viajamos a la Región de Murcia para conocer lo que esconde el impresionante Castillo de Monteagudo.

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Es el momento más que perfecto para poner rumbo a la Región de Murcia, concretamente hasta su capital. Allí encontramos un gran número de construcciones y monumentos verdaderamente impresionantes, a la par que espectaculares. Un claro ejemplo está situado aproximadamente a 5 kilómetros de la ciudad.
Estamos hablando, como no podía ser de otra manera, del Castillo de Monteagudo. Entre sus numerosas características, cabe destacar que está enclavado en un puntal rocoso que se eleva 149 metros sobre el nivel del mar, por lo que domina a la perfección toda la Huerta de Murcia. ¡Está en un lugar verdaderamente estratégico!
El Castillo de Monteagudo (Murcia), a través de su historia
Para conocer su origen, debemos tener en cuenta el preciso instante en el que se incluyó a Orihuela en la Taifa de Denia. Esto hizo posible que Monteagudo se convirtiese, indudablemente, en la vanguardia fortificada del primer reino musulmán de Murcia durante la primera mitad del siglo XI.
Por aquel entonces, Abderramán Ibn Tahir fue encarcelado en este Castillo tras su destronamiento. El segundo periodo fue clave para la taifa murciana. Gracias a esto, Monteagudo pasó a ser parte de un importantísimo conjunto arquitectónico, junto al Castillejo de Monteagudo y la fortificación de Larache.

En el siglo XIII, el reino taifa de Murcia pasó a formar parte de la Corona de Castilla. Así pues, el Rey Alfonso X el Sabio hizo de este Castillo su residencia en esta zona. Al situarse a las afueras de la ciudad, el Rey prefirió hospedarse en este lugar durante su visita en 1257 antes que hacerlo en el Alcázar Mayor de Murcia. El paso del tiempo hizo que el monarca decidiese entregar este lugar a su esposa doña Violante de Aragón y, posteriormente, pasase a manos de doña María de Molina.
No podemos dejar de mencionar el año 1311, cuando el Rey Fernando IV optó por ceder a la diócesis de Cartagena todas aquellas propiedades de María de Molina en el Reino de Murcia. Y lo hizo a cambio del Castillo de Lubrín, que el obispo Martín Martínez Noloaquisino conquistó en 1309 al Reino Nazarí.

Tras haberse hecho efectivo el conflicto entre los Reinos de Castilla y de Aragón por el de Murcia, el valle del Vinalopó pasó a formar parte del Reino de Valencia en 1304. Por lo tanto, el Castillo de Monteagudo se convirtió en un punto estratégico de los castellanos en esta zona.
A pesar de haber sido especialmente importante durante la Baja Edad Media, todavía en el siglo XVI este Castillo conservaba su importancia militar. Es más, fue mencionado en las históricas relaciones topográficas de Felipe II. Aun así, conforme las actividades bélicas fronterizas entre las Coronas de Aragón y Castilla cesaban, esta fortaleza también iba perdiendo relevancia. Sea como sea, y como no podía ser de otra manera dada su importancia histórica, cultural y arquitectónica, el Castillo de Monteagudo de Murcia fue declarado Monumento Nacional en 1931.
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