El Castro de Baroña y Area Longa, una paradisíaca playa en Porto do Son

Hablamos de la playa de Area Longa, en Porto de Son y del mítico Castro de Baroña, una playa deliciosa junto a uno de los restos celtas más admirados no solo de Galicia sino también de Europa; la mezcla es maravillosa: historia antigua, verano y playa, además el clima acompaña porque estamos en 'A Ría de Estrela', en el corazón de las Rías Baixas gallegas, esas que de unos años a esta parte son popular y jocosamente conocidas como Galifornia.

El Castro de Baroña es lo que queda de un pequeño poblado celta que habitaba estas tierras allá por la Edad de Hierro, ocupa una península unida a tierra solo por una lengua de arena; su imagen es un icono de Porto do Son, de Galicia y de su reconocido pasado celta y es, sin duda, una de las visitas obligadas si tienes por destino las Rías Baixas gallegas porque allí se conserva la planta de unas 20 viviendas celtas de lo que era, entre el S.I aC y el S.I dC, una ciudad amurallada, de hecho se conservan también perfectamente conservados los restos de la muralla que servía como principal defensa del poblado.

Además la visita al Castro de Baroña tiene como premio un día de playa en uno de los mejores arenales de Galicia, se trata de la playa de Area Longa, un pequeño paraíso en A Ría da Estrela porque al a magnificencia de estar situada junto a un enclave histórico como es el Castro de Baroña, añade que está en un entorno natural y rodeada de vegetación, eso además de su estupenda arena blanca y su mar limpio... (eso sí, un poco frío aunque eso puede llegar a ser una ventaja si visitas este enclave gallego en alguno de los tórridos días de verano de Galifornia...).

Area Longa no es ni mucho menos la única playa digna de una tarde de sol y mar en Porto do Son, de hecho esta localidad pasa por ser la que cuenta con más playas de toda Galicia, hasta 20 podrás visitar sin salir de su término municipal, todas repartidas en sus 25 kilómetros de costa; las hay para todos los gustos: playas vírgenes, urbanas, grandes arenales para pasear, pequeñas calas, algunas ideales para disfrutar de la puesta de sol...

Y por supuesto las hay tranquilas, ideales para ir con niños o para quienes gustan de bañarse sin temor a que una ola les de un revolcón y otras más venteadas y con mayor oleaje, que son las que elegirán los amantes del surf y del windsurf, dos deportes que tendrás múltiples oportunidades de practicar en Porto do Son.