MADRID
Descubre el Palacio de Aranjuez a través de estas curiosidades
El Palacio de Aranjuez es verdaderamente espectacular. Es hora de verlo desde otro punto de vista, a través de estos datos curiosos.
Publicidad
El Palacio de Aranjuez es uno de los atractivos turísticos más conocidos de la Comunidad de Madrid. Año tras año, muchos son los visitantes que deciden acercarse a conocer esta edificación que, además de ser una auténtica preciosidad, ha sido escenario de hechos históricos verdaderamente importantes.
Su historia está estrechamente ligada a la del emperador Carlos V, ya que se empeñó en desarrollar Aranjuez como una sorprendente villa que contase, a su vez, con un importante coto de caza. El Palacio como tal fue erigido por su hijo, el rey Felipe II. El monarca tomó la decisión de encargar este proyecto a Juan Bautista de Toledo.
A pesar de todo, el arquitecto falleció durante su construcción. Es entonces cuando Juan de Herrera, su discípulo, cogió las riendas de la obra y la terminó. Tiempo más tarde, durante el reinado de Fernando VI, se decidió realizar una importantísima y crucial ampliación que continuaría Carlos III.
Un claro ejemplo lo encontramos en esa Casa del Labrador que forma parte del conocido como Jardín del Príncipe. Y hablando de jardines… debemos tener en cuenta que estamos ante los más destacados e importantes del periodo de los Habsburgo. ¡Y no es para menos!
Centrándonos en el Palacio, debemos destacar el Gabinete de Porcelana, la Sala China y la Sala de los Espejos. Muchos son los puntos y elementos de esta edificación que cuentan con una serie de curiosidades que confirman que, efectivamente, estamos ante un Palacio que ha sido testigo de numerosos hechos históricos.
El Palacio de Aranjuez, a través de sus curiosidades
Uno de los puntos más destacados de este Palacio, en cuanto a historia se refiere, nos hace trasladarnos a su sorprendente Patio de Armas. Y es que en ese mismo punto, tuvo lugar el motín de Aranjuez. El pueblo entró al palacio por esa zona, pidiendo la destitución de Godoy pero también la abdicación de Carlos IV.
Una de las cuestiones que más llama la atención de este Palacio es que, en prácticamente cada habitáculo, podemos encontrar ciertos toques “isabelinos”. Esto no es producto de la casualidad, ya que la reina Isabel II fue la última en vivir entre esas paredes.
Otro dato curioso es que la familia real contaba con una zona privada en la que poder acudir a misa sin juntarse con el resto de personas. Estamos hablando de la Tribuna Real que, a día de hoy, puede visitarse. El Gabinete de Porcelana, una de las zonas más conocidas de este Palacio, tiene una historia muy especial.
El nombre está vinculado al rey Carlos III, que tenía una fábrica de porcelana en Nápoles. Cuando el monarca llegó a España, se trajo en dos barcos tanto los materiales como a los trabajadores. Estamos ante una sala emblemática puesto que, desde luego, no hay otra ni tan siquiera parecida en todo el mundo.
...
También te puede interesar...
Madarcos, el municipio más pequeño de Madrid, recibe un reconocimiento de la UNESCO
Publicidad