PARA AMANTES DE LA BUENA GASTRONOMÍA
El lado más auténtico y foodie de Palma
Que Palma es un destino gastronómico de primer orden es algo que ya sabemos. Y lo es porque a sus productos de mar y montaña, y a sus recetas con siglos de tradición se unen influencias de muchas culturas y chefs que utilizan hoy más que nunca los mejores y más frescos ingredientes para sus elaboraciones.
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La capital balear es ya uno de los destinos gastronómicos de moda, como muchos otros en nuestro país. Y hay unos espacios que ocupan un lugar relevante, podemos decir que son templos para los foodies y además auténticos. Hablamos de los mercados.
En los mercados de Santa Catalina, el Mercat 1930 y el de San Juan y L’Olivar los puestos venden productos locales de primera calidad, pero también encontramos restaurantes con cocina de mercado y algunos espacios gourmet. Son el lado más popular de la gastronomía de Palma, y un punto de encuentro para los amantes de la buena cocina.
El mercado de Santa Catalina, el sabor de la tradición
Santa Catalina es el barrio de moda en Palma. Situado cerca del puerto, en una antigua zona de pescadores, por sus calles se suceden los edificios modernistas, los restaurantes y los establecimientos tradicionales. Pero uno de los lugares más emblemáticos del barrio es el mercado, que es además el más antiguo de la ciudad.
Ubicado en un edificio de principios del siglo XX, sus 50 puestos ofrecen especialidades como pescado, marisco, carne, embutidos, quesos, fruta o verdura. Pero además, cuenta con tres bares que han convertido dentro del mercado en un espacio de lo más foodie ya que permiten disfrutar de todos los productos que se venden en los puestos, pero ya elaborados.
Mercat de l’Olivar, lo de ahora y lo de siempre
Desde que abriera sus puertas en 1951, este mercado de abastos ofrece los mejores productos de la gastronomía local. Con un centenar de comercios, L’Olivar está especializado en productos frescos, de primera calidad y autóctonos. Frecuentado por los vecinos que acuden a realizar su compra diaria, ahora también se ha reconvertido y son muchos los visitantes de la ciudad los que buscan entre sus puestos, los establecimientos gastronómicos que sirven bocados elaborados con los mejores ingredientes: bocados tan deliciosos como sushi, gambas, ostras y mucho más.
Con un espacio único en la primera planata: La Gastroteca. Un espacio gastronómico decorado con mimo que selecciona cada mañana productos frescos y de temporada de los puestos para elaborar su menú.
Mercat 1930, la renovación gastronómica de Palma
Y Palma renueva su oferta gastronómica cada día. Muestra de ello, es el Mercat 1930, abierto el verano pasado en el Paseo Marítimo de la ciudad. Con sus cocinas abiertas al público, este mercado gastronómico ofrece 16 opciones culinarias que van desde la cocina más tradicional a las propuestas más innovadoras.
Un espacio vivo donde se suceden los eventos culinarios. Desde presentaciones de productos, a semanas temáticas, catas, y mucho más. Y todo en el mítico edificio Mediterráneo, reconvertido en mercado gourmet. Un imprescindible si vas a visitar la capital.
Mercado gastronómico San Juan, un must para los foodies
Y por último un espacio único y auténtico para los más foodies. Los siete pecados capitales son el leitmotiv de este mercado, otro templo gastronómico de reciente apertura. Porque la gastronomía está muy viva y muy de moda en Palma.
Ubicado en un precioso edificio modernista, el del centro cultural de S’Escorxador, este mercado está abierto todos los días del año hasta las 00:00 horas, un horario que se amplía los fines de semana.
Y entre todos los establecimientos, destacan dos: The One, un bar con preparados y cócteles, y Cooking 4 people, ideado para que la gente pueda elaborar sus propios platos y unirse a diferentes actividades gastronómicas. Es lo más.
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