Escapadas con historia
España y 5 castillos de cuento
Los castillos, que se construyen como bastiones defensivos ante posibles invasiones, se convierten en perfectos escenarios de cuento en el S.XXI.
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Cuando hablamos de castillos de cuento pensamos en los grandes palacios y castillos del centro de Europa y hasta en Sisí Emperatriz, aunque ella fue tan real como Grace Kelly, mujeres que protagonizaron en la historia papeles propios de un cuento aunque sus vidas fueron un juego de luces y sombras como la de cualquier mujer de carne y hueso. Pues bien, lo cierto es que los castillos no son patrimonio de los cuentos sino de la historia y de eso en España tenemos ya no años sino siglos escritos en piedra.
Hoy os recomendamos 5 castillos magníficamente conservados que son patrimonio histórico y cultural de nuestra arquitectura y de toda España; 5 castillos que vivieron historias reales y que bien podrían ser escenarios de cuentos como lo son algunos de los más célebres castillos europeos.
Comenzamos por Segovia porque la ciudad en sí nos enamora, desde su barrio judío hasta su soberbio acueducto pasando antes por el Alcázar, un castillo de cuento que se puede visitar y conocer en él un pedazo de la historia de España. Se trata de una construcción medieval que nació como fortaleza y que fue después palacio real, hoy se puede visitar y, desde luego, bien merece que la visita sea guiada; una parte del Alcázar ardió pero se ha reconstruido y se conservan además partes que se salvaron de aquel desastre, conviene no perder de vista los techos, son espectaculares.
De un castillo de Castilla a otro, el de los templarios ubicado en Ponferrada; se trata de un castillo con una historia convulsa, basada principalmente en las idas y venidas de los templarios que, una vez vieron su orden disuelta en Francia, cedieron este castillo a la corona que previamente les había permitido establecerse en esta población. Es patrimonio nacional desde hace un siglo y, dado que su historia es tan larga como para que esté construido sobre las ruinas de un castro celta, bien podría dar para ser un castillo de cuento… eso sí, no uno de hacas sino tal vez uno de terror al estilo de Poe.
El tercero de nuestros castillos de cuento esconde un delicioso plan de enoturismo, es el de Peñafiel; se trata de un castillo que comenzó a edificarse en el S.X y que sufrió importantes remodelaciones en los siglos XIV y XV; es monumento nacional y además da cabida al museo provincial del vino, una visita obligada si hablamos de brindar con un Ribera del Duero.
Salimos de Castilla para conocer un castillo cordobés, el de Almodóvar; si las piedras hablasen algunas de las de este castillo podrían contar siglos enteros de historia; se trata de una construcción bereber sobre los restos de un castro romano; sufrió reformas con posterioridad pero lo que vemos es, esencialmente, el soberbio castillo árabe que fue y que, al menos en su estética, sigue siendo a día de hoy. Fue, además, residencia real de Pedro I y Enrique II, ambos reyes del S.XIV.
Y cerramos nuestro quinteto de castillos de cuento en el norte, en el castillo de Butrón; se trata de un castillo medieval que sufrió una importante remodelación en el S.XIX y que presenta en consecuencia, hoy, un aspecto poco común en una construcción medieval. Es un edificio singular y único, de inspiración bávara, que bien pudiera inspirar un cuento... o dos. Y además está ubicado en Vizcaya y representa, indudablemente, una estupenda excusa para visitar el País Vasco y disfrutar de unos pintxos y un txacolí.
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