48 horas en El Burgo de Osma

Uxama

Al llegar a la ciudad de Osma, encontraremos la ciudad celtibero-romana de Uxama. En la época prerromana, Uxama era un asentamiento arévaco, pueblo celtíbero que mostró su fiereza y poderío a los hijos de Roma. Pese a ello, acabaron bajo el dominio del imperio. Destacan los restos de una villa romana, y en las terrazas se advierten vestigios de lo que una vez fueron relevantes estructuras.

Las atalayas fronterizas de Almanzor y el Castillo de Osma

Una buena forma de empezar el día, es dar un largo paseo por la ribera del río y llegar hasta el castillo, que actualmente se encuentra en proceso de restauración. Esta edificación defensiva fue levantada entre el siglo X y el XI. Y sufrió modificaciones entre el siglo XIV y el XV. Por su parte, alrededor de la ciudad hay varias atalayas, que sirvieron en el avance de la Reconquista. Osma fue durante un tiempo frontera entre los árabes y los reinos cristianos.

La gastronomía

Como sabemos Soria es la tierra del torrezno. Aquí, en cualquier bar o restaurante que visitemos podremos degustar este manjar. Crujiente pero tierno, lleno de sabor. Y podemos acompañarlo de la cerveza Arevaka, de producción local, en el mismo Burgo. De hecho, en una de las calles cercanas a la Plaza Mayor está la tienda donde la sirven. Sin duda, una combinación perfecta para el aperitivo.

El Burgo de Osma, conjunto histórico

Esta ciudad mantiene su entramado medieval, así como sus murallas. La Catedral de Santa María de la Asunción es de estilo gótico y está construida sobre la primitiva iglesia que era románica. Otro de los edificios destacables es el Hospital de San Agustín que data del siglo XVII, y preside la Plaza Mayor, junto con el Ayuntamiento (siglo XVIII). Como vemos, El Burgo de Osma es una amalgama de edificios de diferentes épocas históricas. Por su puesto no podemos olvidar uno de los más nobles, el Palacio Episcopal.

Parque Natural Cañón del Río Lobos

Después de pasar un día en la villa, podemos lanzarnos a conocer otros parajes en las cercanías del Burgo. Al norte de la ciudad, a orillas del río Ucero, podemos recorrer el Parque Natural Cañón del Río Lobos. Una gran opción para adentrarse en la naturaleza, disfrutar de las escarpadas paredes plagadas de buitres y, en el centro, la ermita románica de San Bartolomé. A los amigos de la montaña y el senderismo no se les puede escapar el turismo micológico y la recogida de setas que por estas fechas plagan sus montes y sus mesas.