CASTILLA Y LEÓN
Iglesia de San Claudio de Olivares, el templo románico más antiguo de Zamora
Ponemos rumbo hasta la ciudad de Zamora, para conocer la historia del templo que alberga la imagen del Cristo de la Batallas: la Iglesia de San Claudio de Olivares.
Publicidad
Es el momento perfecto para poner rumbo hasta Zamora. En esta ciudad de Castilla y León encontramos un gran número de construcciones, monumentos y rincones que consiguen dejarnos completamente sin palabras. Es el momento de conocer uno de sus templos más icónicos. Estamos hablando, cómo no, de la Iglesia de San Claudio de Olivares.
Situada en el barrio zamorano de Olivares, debemos tener en cuenta que son muchos los historiadores que consideran que es la iglesia románica más antigua de las que podemos encontrar en la ciudad. Es conocida, a su vez, porque en ese lugar se rinde culto a la imagen del Cristo del Amparo, que procesiona el Miércoles Santo en la conocida “Procesión de las Capas Pardas” de la Hermandad de la Penitencia.
La Iglesia de San Claudio de Olivares, a través de su historia
Debemos tener en cuenta que hay pocos datos sobre el origen de este templo. De hecho, la primera referencia a nivel documental nos hace viajar hasta el año 1176. Lo que sí es cierto es que, como se ha mencionado anteriormente, muchos son los autores que consideran que es la iglesia románica más antigua de Zamora que todavía sigue en pie.
Un claro ejemplo lo encontramos en Antón Rapino, que cree que muchos de los elementos decorativos que encontramos en esta Iglesia de San Claudio de Olivares tendrían vinculación con la zona sur de Francia. Y todo por la gran cantidad de galos que acompañaron al yerno del Rey Alfonso VI, Raimundo de Borgoña, en su proceso de repoblación de Zamora y alrededores. El mencionado autor, de hecho, cree que este templo se erigió entre los años 1100 y 1109.
La Iglesia de San Claudio de Olivares, a través de sus características
Entre otras cuestiones, cabe destacar que es un templo de pequeñas dimensiones, que está formado por una única nave irregular. En sus inicios estuvo abovedada pero, debido a la cercanía de este muro con el río Duero, las crecidas provocaron que quedara destruido. Por ese mismo motivo, se sustituyó por una armadura de madera.
Un año a tener en cuenta es 1910, cuando se llevó a cabo una considerable reparación de la mano de Francisco Nieto Martín según el proyecto establecido por Joaquín de Vargas y Aguirre. En ella, no solamente se rehicieron los muros meridional y occidental, sino también las bóvedas situadas en la capilla mayor.
Las marcas de cantero, un elemento a destacar en esta Iglesia
Como curiosidad, debemos tener en cuenta que en la Iglesia de San Claudio de Olivares se han llegado a identificar hasta 108 signos de, aproximadamente, 25 tipos diferentes. Este tipo de marcas, así como su morfología, nos hacen viajar a una etapa comprendida entre los siglos XII y XIII.
Sea como sea, lo cierto es que la Iglesia de San Claudio de Olivares es uno de los templos más espectaculares que podemos encontrar en Zamora. No solamente por su recorrido en la historia, sino también por lo peculiar que es. Estamos absolutamente convencidos de que no te dejará indiferente.
Publicidad