5 maneras diferentes de disfrutar de Tenerife

Cada vez vamos sintiendo más lejos un verano que ya nos ha dejado y es el momento de dar paso al otoño, una época del año bellísima que ofrece también muchas posibilidades. Y en este otoño, tenemos un destino ideal que siempre ha estado ahí y que siempre estará ahí: Tenerife, una de las islas más bonitas de Europa que puede ser disfrutada de muchas y diferentes maneras.

Tenerife es principalmente conocida por el Parque Nacional del Teide, y es lógico que esto sea así. Es el lugar más visitado de la isla y como seguramente sepáis el pico más alto de España, con más de 3.700 metros. Es una visita obligada que no necesita presentación de ningún tipo, y que sin duda nos ayudará a conocer la esencia de la isla. El paisaje desértico que rodea el Teide y el ascenso al mismo es imperdible, y debe estar siempre entre nuestras prioridades si visitamos Tenerife.

Al margen del Teide, si algo caracteriza Tenerife son sus playas. También en otoño, disfrutaremos de buenas temperaturas y de un ambiente idílico. La costa cuenta con más de 400 kilómetros entre los que se encuentran 70 playas de todo tipo, con aguas cristalinas, preciosas arenas de tonalidades claras y también playas negras, volcánicas, que completan esa característica que siempre se ha usado para hablar de Tenerife: es una isla llena de contrastes, de paisajes de todo tipo.

Y de esos paisajes podemos disfrutar de otra manera: haciendo senderismo. Tenerife es una de las regiones ideales para este tipo de actividad física, pues los senderemos están perfectamente señalizados y acondicionados, y son también muchos y variados. Bosques frondosos de los que no podemos disfrutar en otro lugar, espacios naturales protegidos que ofrecen rutas imperdibles, acantilados con un encanto especial... Tenerife lo tiene todo: playa y montaña.

Otra manera de disfrutar de sus playas: con las actividades acuáticas. Desde deportes sobre el agua como el windsfur hasta avistamiento de animales como el delfín mular, embarcándonos en viajes por el mar que no querríamos que terminasen. Tenerife tiene una amplísima oferta de actividades de todo tipo que el turista puede aprovechar en cualquier punto de la isla.

Y también es importante conocer el interior, sus pueblos, su gente, su forma de vida, su cultura. Aunque podríamos quedarnos disfrutando de sus paisajes naturales, nunca llegaríamos a conocer por completo la vida en Tenerife si no nos animamos a recorrer sus pueblos más emblemáticos y también los más desconocidos. Como veis, hay muchas maneras diferentes de conocer Tenerife, y todas ellas son sensacionales.