Palacio de San Telmo de Sevilla: ¿sabías que fue construido para albergar un colegio de marineros?

Ponemos rumbo a la ciudad de Sevilla, donde encontramos uno de los edificios más icónicos y característicos de la capital de Andalucía. Estamos hablando, cómo no, del Palacio de San Telmo. En la actualidad es nada más y nada menos que la sede de la Presidencia de la Junta.

Estamos ante un edificio de estilo barroco, construido entre los siglos XVII y XVIII para ser la sede de un colegio de marineros, conocido como Colegio Seminario de la Universidad de Mareantes. Durante la segunda mitad del siglo XIX, este Palacio de San Telmo se convirtió en la residencia del Duque de Montpensier, así como de la Infanta María Luisa. Tiempo después, en el siglo XX, se convirtió en un seminario diocesano. ¡Conozcamos su historia en profundidad

El Palacio de San Telmo de Sevilla, a través de su historia

Para comenzar, debemos saber que se construyó en el año 1682, con el fin de albergar el mencionado Colegio Seminario de la Universidad de Mareantes. A partir del año 1849, pasó a manos de los Duques de Montpensier. Fueron ellos los que no solamente construyeron la portada del apeadero, el ala este y el salón de baile sino que, además, pudieron finalizar la torre norte.

En cuanto a esas nuevas estancias, debemos tener en cuenta que fueron doradas y estucadas por Pelli y Rossi. En cuanto a sus paredes, fueron decoradas con pinturas que fueron traídas nada más y nada menos que del Palacio de Vista Alegre. Rafael Tejeo fue quien se encargó de decorar los techos del imponente salón de baile del Palacio de San Telmo.

En cuanto a esta edificación, que con el paso de los siglos se convirtió en una de las más icónicas y características de Sevilla, cuenta con una planta rectangular con cuatro torres y un imponente patio central. Llama poderosamente la atención la fachada, que data del siglo XVIII, siendo obra de Leonardo de Figueroa.

Por aquel entonces, este Palacio contaba con agua corriente, electricidad, telégrafo, cuartos de baño e, incluso, hasta un embarcadero para poder acceder directamente al río Guadalquivir. No podemos dejar de mencionar su espectacular jardín, que más tarde pasó a ser el conocido como Parque de María Luisa.

Un elemento a destacar en este Palacio es, precisamente, su capilla. Ésta se ha convertido en una representación perfecta en cuanto al arte andaluz se refiere. Consta de una sola nave, bóveda de cañón y un total de cinco retablos. El principal de ellos está dedicado a la Virgen del Buen Aire. Los dos que están en el lado de la epístola son en honor a San Antonio y Santo Tomás de Aquino, mientras que en los otros dos vemos a San José y a un Cristo crucificado.

En el año 1897 muere María Luisa Fernanda y, con ello, se hace efectiva la donación del Palacio de San Telmo al arzobispado. Años más tarde, concretamente en 1901, se convierte en un seminario diocesano. No fue hasta el año 1989 cuando pasó a manos de la Junta de Andalucía. Ésta, tras rehabilitar varias zonas, lo convierte en la sede de la Presidencia en abril de 1992.