Tras los pasos de Miró en Palma

Siempre es buena época para visitar Palma. Y si, además eres un amante del arte, nada mejor que aprovechar la primavera para hacerte una escapada a la ciudad. Así, el visitante que se acerque a Palma podrá descubrir el legado del considerado uno de los máximos representantes del surrealismo en diferentes espacios, entre ellos, en la Fundación Pilar y Joan Miró, en el hotel Miró o en los recientemente abiertos jardines del palacio de Miravent que albergan 12 esculturas del artista.



Gran parte de la obra de Joan Miró se puede contemplar en la Fundación Pilar y Joan Miró. En ella, además de ver las pinturas, esculturas y grabados del artista, se puede descubrir su manera de trabajar visitando los talleres en los que Miró creó durante 27 años, entre 1956 y 1983. Dos de los edificios que se visitan, creados por los arquitectos J.L. Sert y Rafael Moneo, aportan valor al conjunto. Además de ser un espacio expositivo, la Fundación Pilar y Joan Miró trabaja para fomentar la creación de jóvenes artistas con becas, premios y otras tareas educativas. 



La apertura de los jardines del Palacio Marivent ha generado una gran expectación y no es para menos. A su gran valor histórico, botánico, paisajístico y cultural se le suma un nuevo atractivo: una exposición permanente compuesta por doce obras en bronce del artista, distribuida por los más de 9.000 metros cuadrados del espacio. La entrada a los jardines es gratuita y permanece abierta durante todo el año salvo 15 días en Semana Santa y entre el 15 de julio y el 15 de septiembre.



No podría ubicarse en otro lugar. El hotel Joan Miró Museum de Palma es el único hotel temático dedicado al artista. Además de estar inspirado en las creaciones de Miró, en su interior se puede contemplar una colección de 28 piezas cedidas por la familia. Las obras se exponen en los diferentes ambientes del establecimiento, permitiendo a los clientes conocer de primera mano el mundo surrealista diseñado por Joan Miró y observar piezas como El Rapto, La primera noche de la primavera o Sálvese quien pueda.



Y aunque estos tres espacios concentran gran parte de la obra del artista, existen otros lugares donde se exhibe su trabajo que muestran que el vínculo entre Miró y Palma no atañe solo a lugares concretos, sino a todo Palma. Por ejemplo, es posible encontrarse con dos esculturas del artista en la Avenida Jaime III y junto a la Almudaina y, en el Parc del Mar, contemplar su mosaico. Además, museos como el Museo de Arte Moderno y Contemporáneo Es Baluard o la Fundación Juan March albergan algunas piezas del artista catalán para el disfrute de sus visitantes. Ya tienes otra forma de descubrir una ciudad con otras maravillas, como la Catedral de Santa María de Palma, el Castillo de Bellver, el Palacio de la Almudaina, el Castillo de San Carlos, la Lonja o el Consulado del Mar.