Los pueblos más bonitos de Galicia

Galicia es una comunidad autónoma un tanto particular. Y es que está repleta de paisajes de lo más variados. Así, por sus Rías Baixas y sus Rías Altas encontramos muchos bosques, ríos salvajes, costas perfiladas, pueblos chiquititos y grandes ciudades. Y en esos lugares encontramos otros característicos de allí: sus cruceiros, hórreos y pallozas, por ejemplo.

Como decíamos, si una cosa hay clara es que es una zona particular y bella. Podríamos pasarnos horas hablando de su rica gastronomía o de todos esos puntos de interés que la caracterizan. Pero lo que vamos a hacer a continuación es centrarnos en sus pueblos. En los más bonitos. En los que te van a enamorar.

Mondoñedo

Este pueblo podemos visitarlo si vamos hasta Lugo y su principal atractivo es su preciosa catedral. Aunque tampoco está de más darse un paseo por sus calles de fachadas blancas con cristaleras.

Combarro

Combarro es uno de los pueblos más característicos de Galicia. Y es que allí se mezclan mar y montaña y hay un precioso puerto pesquero, también típico de la zona. Aunque en realidad, todavía más típico que eso son sus hórreos, es decir, construcciones elevadas del suelo con pilares para evitar la humedad en su interior… y los hay a montones. Todo un símbolo de la arquitectura gallega.

Muros

La localidad de Muros se encuentro en la frontera entre las Rías Baixas y las Rías Altas. Sus calles son estrechas y zigzagueantes y todas acaban en monumentos como los cruceiros, fuentes o pequeñas plazas. Además, en Muros hay uno de esos típicos, bonitos y pintorescos puertos pesqueros de los que antes hablábamos. Pero si quieres visitar un lugar en concreto, acércate al molino de Marea.

O Cebreiro

Si haces el Camino Francés para llegar a Santiago tienes que hacer parada obligatoria en O Cebreiro. ¿Por qué? Porque es especialmente bonito y porque es uno de los pocos lugares en los que todavía se mantienen en buen estado las pallozas. Es decir, las magníficas y curiosas viviendas prerrománicas.

Betanzos

Podríamos decir que Betanzos es la capital del gótico gallego, porque su casco histórico está inundado de edificios que se levantaron entre los siglos XIV y XV. Pero la antigüedad lo único que hace es aportarle belleza y convertirlo en un lugar que se debe visitar sí o sí.