León
Tiempo de Magosto en El Bierzo (y en tu casa)
Otoño es tiempo de castañas y, por tanto, tiempo de magosto también en El Bierzo, una tradición a la que acercarnos estos días sino personalmente, al menos virtualmente.
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Cuando recordamos nuestro pasado como provincia romana, solemos pensar en vestigios como el acueducto de Segovia o la imponente Tarraco pero ¿sabías que también debemos a los romanos las castañas de El Bierzo? como lo lees, fueron las legiones romanas las que traían castañas como alimento para quienes estaban trabajando en las Médulas, hoy uno de los paisajes más espectaculares de España pero entonces una mina de oro, cabe que por eso, entre otras razones, las castañas de el Bierzo sean llamadas 'oro marrón'.
El Bierzo tienen en el otoño su época más bella y espectacular, en parte por las castañas y los magostos que se organizan con este manjar leonés, y en parte por su paisaje, porque los bosques ocres del otoño con las cumbres de las montañas luciendo ya sus primeras nieves nos regalan estampas inolvidables, estampas que este año tendremos que conformarnos con disfrutar en fotografía (salvo que vivas por la zona, claro está...) del mismo modo que los magostos se organizan en casa, eso sí, no importa si estás en El Bierzo o no para disfrutar esos magostos íntimos, sólo debes asegurarte de hacerte con una buena cantidad de 'oro marrón' leonés, sus castañas, un producto con sello de calidad y marca de garantía de El Bierzo.
Es verdad que si organizas un magosto en casa difícilmente encenderás una hoguera para asar en sus chascas, y en un chambombo, tus castañas, es más, probablemente ni tengas un chambombo ni sepas lo que es... (se trata de un cilintro metálico dentro del que se meten las castañas para que se asen en la hoguera una vez que el fuego ha dejado de arder con fuerza); ahora bien, eso no significa que no puedas poner la sartén al fuego o encender el horno y asar castañas, recuerda que en El Bierzo hay quien las acompaña de chorizo y vino...
Vivimos malos tiempos para viajar y peores aún para las fiestas y celebraciones pero no por eso tenemos que dejarnos llevar por la tristeza y renunciar a los placeres de la vida, placeres como un buen magosto; sacúdete la tristeza y también la pereza, hazte con unas cuantas castañas de El Bierzo y celebra tu propio magosto conjurándote con tus convivientes para que el próximo otoño vivais un magosto en El Bierzo.
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