Todo lo que debes hacer en un viaje de 24h a Soria

Aunque en ocasiones haya personas a las que se les olvide o no lo tengan en cuenta, la provincia de Soria se encuentra en Castilla y León y cuenta con bonitos espacios naturales y un amplio patrimonio artístico, entre el que destacan representaciones del románico como la Iglesia de San Miguel, en San Esteban de Gormaz.

Así pues, conocer la provincia en solamente 24h es completamente imposible. Sin embargo, en estas líneas vamos a centrarnos en hablar de Soria capital, para la visita de la cual sí tendrás suficiente con pasar allí un día.

El itinerario por Soria, por tanto, puede comenzar en la Alameda de Cervantes, situado en el corazón de la ciudad y sirviendo de pulmón para la misma. Se trata de unos jardines que también reciben el nombre de la Dehesa y en los que podrás pasear sobre suelos que se tiñes de los tonos amarronados de las hojas que caen de los árboles ahora en otoño. Allí, además, podrás descubrir fuentes y rincones con encanto, tumbarte a descansar en un césped o caminar bajo árboles que parecen formar arcos con sus ramas.

Tras la visita al parque puedes adentrarte en la calle Collado, la que más vida tiene de toda Soria. Y admirar edificios como la iglesia San Juan de Rabanera, uno de los más destacados de la ciudad. Además, durante tu visita a Soria puedes ver palacios renacentistas como por ejemplo el de los Castejones, situado en la calle Aduana Vieja. O la iglesia de Santo Domingo, de fachada románica.

Otra de las cosas que puedes hacer en Soria, además de lo mencionado hasta ahora, es recorrer su Mercado Municipal. También puedes acercarte hasta el Palacio de los Condes de Gómara para ver su doble arcada o su torre o perderte por su casco antiguo, en el que encontrarás lugares como la Plaza Mayor, en la que está la iglesia Nuestra Señora de la Mayor, en la que se casó Machado.

Por supuesto, una visita a Soria jamás estaría completa sin contemplar cómo fluye el agua del río Duero. Así pues, con todo lo demás visto y ya por la tarde, un buen plan es bajar hasta el río, visitando durante el trayecto lugares como la concatedral de San Pedro. Y ya a orillas del río se puede cruzar el puente de piedra para visitar lo que hay al otro lado de la ciudad: el monasterio de los hospitalarios de San Juan de Duero o el monasterio de San Polo, entre otros.

Con muchos pasos ya dados a lo largo del día y como colofón final, la visita a la ciudad de Soria se puede terminar con un ascenso al parque del Castillo, en el que además de las ruinas de una antigua fortaleza hay unas zonas muy bonitas para pasear y, como no podía ser de otra manera en una zona alta, también unas bellas vistas de Soria que son más bonitas todavía durante el atardecer.

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