Tordesillas: 6 rincones que no te dejarán indiferente

A orillas del conocido río Duero, encontramos la villa de Tordesillas. Esta localidad, ubicada en la provincia de Valladolid, ha conseguido conservar su historia. Estamos, sin lugar a dudas, ante un lugar donde, a cada paso que das, puedes ser partícipe de lo que ocurrió hace miles de años. Su patrimonio no deja indiferente a nadie.

Esta villa cortesana ha sido conocida, entre otras cuestiones, por la reclusión de reinas y damas. Pero no todo queda ahí. Tordesillas estuvo rodeada por una espectacular muralla con torres y hasta cuatro puertas, situadas en los puntos cardinales. De esta estructura tan solo queda la conocida Torre de Sila. Esto es tan solo el inicio de todo lo que puedes descubrir en esta localidad vallisoletana.

Plaza Mayor

Las calles que rodean este lugar son muy antiguas y, en ellas, podemos descubrir casas de origen medieval, así como palacios en el que se pueden apreciar escudos de sus fundadores. Uno de los edificios que más llama la atención es, sin lugar a dudas, el conocido como Palacio de los Alderete. El que fue regidor de Tordesillas en pleno siglo XV decidió construir su vivienda en una calle histórica como es la de San Antolín.

Casas del Tratado

Están situadas nada más y nada menos que junto a la conocida iglesia de San Antolín. En este mismo lugar se firmó el conocido e histórico Tratado de Tordesillas (1494). Estamos ante dos palacios que datan de los siglos XV y XVII. En él podemos apreciar el escudo de los mismísimos Reyes Católicos. Este famoso acuerdo se firmó entre Isabel I de Castilla y Fernando II de Aragón y el rey Juan II de Portugal. Juntos establecieron el reparto de las zonas de navegación en todo el Océano Atlántico, así como la conquista del llamado “Nuevo Mundo”.

Puente Medieval

Por el que se cruza el conocido río Duero. Cuenta con un total de 10 ojos, así como tajamares de base triangular. Lo que es un hecho es que se desconoce su origen. Eso sí, se cuenta que hubo uno en el siglo X pero que, posteriormente, se remodeló en el siglo XV. Por si fuera poco, se reformó tiempo después, en el siglo XVI. ¡Pero no todo queda ahí! La fuerza del agua terminó rompiendo y deteriorando el puenteo, por lo que se volvió a remodelar en el siglo XVIII.

Iglesia de San Antolín

Es una de las grandes joyas de Tordesillas, sin lugar a dudas. Estamos ante una iglesia gótica, que data del siglo XVI. A pesar de que solamente tiene una nave, lo que es cierto es que está dividida en tramos de diversas épocas. En ese lugar encontramos el conocido Museo de Arte Sacro, donde te fascinará la espectacular colección de las mejores piezas que se encontraban en cada iglesia de Tordesillas. Destacamos, entre otras cuestiones, la capilla de los Alderete donde, en el centro, encontrarás el sepulcro de Don Pedro de Alderete. Si lo deseas, también podrás subir a la torre y descubrir unas preciosas vistas de la ciudad.

Convento de Santa Clara

Es, sin lugar a dudas, uno de los grandes ejemplos de arte mudéjar de toda Castilla y León. Fue construido por el rey Alfonso XI (El Justiciero) con el dinero obtenido de la Batalla del Salado (1340). En ese mismo lugar vivió nada más y nada menos que Leonor de Guzmán. Pedro I, hijo de este rey, terminó la obra para cederla a sus hijas. Éstas decidieron convertir este lugar en un convento. Es un lugar absolutamente precioso, donde destacan la capilla, el patio mudéjar, el Refectorio así como los baños árabes, la Capilla Dorada y la Capilla de los Saldaña.

Iglesia de Santa María

En 1983, por su belleza, fue declarada Bien de Interés Cultural. Estamos ante un espectacular resultado de una transformación del gótico inicial al estilo más clasicista, que nos llega a recordar a El Escorial. Cuenta con tres portadas, así como una torre cuya base es cuadrada. Cabe destacar su sacristía, su gran retablo mayor así como la bóveda de cañón. Si tienes la oportunidad, también te invitamos a descubrir la Iglesia de San Pedro, así como el Hospital de Peregrinos, el Convento de Carmelo y, por supuesto, la Iglesia de San Juan. ¡Te quedarás sin palabras!