EXTREMADURA
Vino, tomate y queso. 3 razones gastronómicas para visitar la provincia de Cáceres
Sobran las razones para visitar Cáceres pero cabe que estas tres te sorprendan: vino, tomate y queso.
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Cuando decimos sque sobran las razones para visitar la provincia de Cáceres no exageramos, lo que ocurre es que además de ser muchas son muy versátiles y, como la moda y las tendencias, cambian de estación a estación; en otoño las comarcas de Tajo-Salor-Almonte, Miajadas-Trujillo y Sierra de Montáchez-Tamuja nos ofrecen experiencias únicas que saben a queso, tomate y vino.
Empezamos por el queso porque en octubre se celebra tanto la Semana de la Torta del Casar, el queso extremeño por excelencia, como la Feria Europea del Queso; durante la celebración de estos eventos en la comarca de Tajo-Salor.Amonte podrás disfrutar de experiencias tan sugerentes como lo es la de elaborar queso y también descubrir en sus diferentes centros de interpretación la importante historia de la trashumancia en esta zona.
De todos es sabido que el queso y el vino maridan bien, por eso no podemo evitar acercarnos a Salvatierra de Santiago, de allí es el vino del tejao que se embotella en botellas negras y se deja madurar ala intemperie, en las canaletas de los tejados (de ahí su nombre, claro). Eso sí, te anticipamos ya que este vino suele servirs con escabeches de hablas y pescado y con guisos de caza, un menú muy propio del otoño que puedes rematar con un postre también muy propio de esta zona, los higos de Almoharín o de Arroyomolinos.
Y para terminar nos pasamos por Miajadas para rematar nuestra degustación extremeña con los tomates procedentes de la Capital Europea del Tomate; es verdad que es en julio y en agosto cuando se celebran las fiestas tomateras de Miajadas pero nunca es mal momento para darse el gusto de saborear una tomatá de patatas y carne; además en esta localidad también podrás visitar el palacio Obispo Solís, donde se conservan algunos cuadros de Massa Solís, autor de un mural sobre Cáceres Patrimonio de la Humanidad que está en la sede de la UNESCO, en París.
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