Murales artísticos
El arte urbano toma las calles de Estepona
La Semana Santa está a la vuelta de la esquina. ¿Cómo la quiere disfrutar? Playa, montaña, rutas gastronómicas, fastos religiosos… ¿alguna vez te has planteado acariciar tu vista con casas pintadas?
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El lugar es el pueblo andaluz de Estepona, que desde hace un tiempo atrae a un buen puñado de visitantes para recorrer su original Ruta de Murales Artísticos… como un auténtico museo al aire libre.
El asunto consiste en deambular por los distintos barrios de Estepona y gozar con las más de 30 espectaculares obras pictóricas que decoran algunas de sus casas y edificios públicos y privados más emblemáticos.
Son murales con mucho pedigrí, llevados a cabo por artistas de la zona pero también han puesto su ‘granito de arena’ artistas de otras geografías, como Curro Leyton, Eric Aman, Conchi Álvarez, Javier Infantes o Blanca Larrauri. A ellos se suman obras como ‘Regando el Jardín’, ‘La Poda de la Buganvilla’, ‘Día de Pesca’, ‘Reflejos del Jardín’ y ‘Una flor de futuro’, que pertenecen al artista José Fernández Ríos, y que reflejan las costumbres marinas y la rica vegetación de Estepona. Como detalle, ‘Día de Pesca’ (en la barriada Isabel Simón), ocupa una dimensión de casi 1.000 metros cuadrados, que lo convierte en el mural artístico de mayor superficie de España.
¿Qué representan estos dibujos al aire libre? Pues, en realidad, la esencia es homenajear a la propia ciudad de Estepona y descubrir aspectos de su tradición marinera, agrícola, urbanística y artística, claro.
Apunta: en el IES Puerta del Mar se alza ‘Quijote del S. XXI, de Curro Leyton, que la realizó como homenaje al personaje de Cervantes en el 400 aniversario de su muerte. Dicho mural tiene 264 metros cuadrados y 16 metros de altura.
En la calle Gravina, se encuentra ‘Ángel, el Buceador’, de Eric Aman. Trazos modernos que refleja a un joven ataviado con traje de baño atravesando una pared de ladrillo. ‘La Casa de la Buena Gente’ es obra de Conchi Álvarez. 80 metros de trampantojo en el que aparecen personajes de la barriada.
Javier Infante vive en Nueva York y siente una gran nostalgia y añoranza por Estepona, así que pintó ‘Azul y mar, emociones líquidas’, en la que se vislumbran el mar, el cielo azul, el horizonte… Melancolía.
Este itinerario cultural por Estepona lleva su tiempo, no se crean. En la Barriada de San Isidro, sobre las paredes de un edificio aparece un recuerdo en color de los paisajes naturales de la villa llamado ‘Tiempo de claridad’, pintado por Ana Cecilia Salinas. Otra artista, Encarna de Hoyos, firma ‘La Huerta de Irene’, en la que se recuerdan las tradiciones agrícolas del pueblo.
Y por terminar con algún mural, nos fijamos en ‘Fundación Antonia Guerrero’, que lo firma Joaquín Aguilera (situado en el barrio Fuerzas Armadas). La que da nombre al ‘cuadro’ fue una luchadora por elevar el nivel de la enseñanza en Estepona. Una de las partes está realizada con resina y planchas de poliuretano; la otra es una pintura de acrílico y óleo.
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