Cinco castillos franceses que te harán viajar en el tiempo

Le Château d’Ussé

En la región del Loira, pero a orillas del río Indre y junto al bosque Chinon, está la antigua residencia real que forma parte del conjunto de castillos del Loira, que en el año 2000 fueron declarados Patrimonio de la Humanidad. La cultura popular lo ha hecho famoso, ya que fue la imagen de póster ferroviarios en los años 20, inspiró a Charles Perrault para escribir La Bella Durmiente, y es uno de los muchos castillos en los que se basó Walt Disney para diseñar los palacios de sus películas.

Cité de Carcasonne

Es una ciudad histórica fortificada, que a pesar de haber sido reconstruida mantiene su esencia de fuerte medieval. Se encuentra en la antigua región del Rosellón, en los Pirineos orientales. En 1997 la UNESCO declaró la ciudadela como Patrimonio de la Humanidad. Esta magnífica fortaleza se encuentra en la orilla derecha del río Aude y sobre una elevación, y la doble muralla que la rodea es de 3 kilómetros de longitud. Su interior permanece como las ciudades medievales con calles estrechas y empedradas.

Le Château de Chenonceau

También se lo conoce como el castillo de las damas, es del siglo XVI y se localiza en la comuna francesa de Chenonceaux. Al igual que muchos otros castillos de estilo residencial, éste también se encuentra en el valle del río Loira. Destaca por la buena conservación de sus infraestructuras, e incluye varios jardines, un laberinto, un parque y una plantación vitivinícola. El foso lleno de agua, para una buena protección, no podía faltar, ni el puente lleno de galerías. Diana de Poitiers (1500-1566) fue una aristócrata que habitó este precioso castillo.

Le Château de Chambord

Es el más grande de todo el conjunto de castillos del Loira. Se construyó por orden del rey Francisco I. Sin embargo, era solo su casón para cuando iba de caza, ya que mantuvo su residencia entre el castillo de Ambois y el de Blois. De esta fortaleza destaca su arquitectura renacentista francesa que mezcla elementos tradicionales del medievo con otros más clásicos del recentismo italiano. El Rey Sol (Luis XIV) habitó este castillo, y el autor Molière realizó en 1670 la primera representación de El burgués gentilhombre entre las paredes de este castillo.

Le Château d’Azay le Rideau

Nuestro último castillo se encuentra en el departamento de Indre y Loira, su planta tiene forma de L y se construyó en una de las islas del río Indre. En 1528, Gilles Berthelot, el tesorero estatal de Francisco I , y dueño de Azay le Rideau tuvo que dejar el castillo incompleto. Durante los siglos siguientes la fortaleza fue cambiando de manos hasta que en el siglo XX lo adquirió el gobierno francés y lo renovó. Las esculturas que encontraremos en Azay son italianizantes, pues ese afán de buscar el gusto por lo clásico estaba muy presente durante su construcción.