Los secretos del viejo continente
Los espacios naturales más bellos de Europa
La Unesco ha declarado estos parajes Patrimonio de la Humanidad y son increíbles rincones naturales europeos. Lagos, glaciares, valles, montañas y volcanes que no deben permanecer ocultos.
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Giant´s Causeway, Irlanda del Norte
Giant´s Causeway, acantilados de basalto en la costa de Antrim, en Irlanda del Norte. También conocidos como la Calzada de los Gigantes, es una zona con más de 40.000 columnas de basalto que provienen del rápido enfriamiento de la lava que surgió de un cráter hace nos 60 millones de años. Aunque sobre su origen existe una leyenda que dice que cuando los gigantes vagaban por la tierra, el gigante irlandés Finn MacCool fue desafiado por el gigante escocés Benandonner. Finn aceptó el desafío y construyó un puente, Giant´s Causeway, para atravesar el Canal Norte que separa Irlanda de Escocia y atacar a Benandonner.
El monte Durmitor, Montenegro
El monte Durmitor, en el parque nacional del mismo nombre, en Montenegro, fue declarado Patrimonio de la Humanidad por la Unesco en 1980. Casi 40.000 hectáreas de naturaleza Un reclamo para montañeros, escaladores, amantes de la naturaleza y turistas en verano y esquiadores y aficionados a los deportes de nieve en invierno, especialmente el snowboard.
Jungfrau-Aletsch-Bietschhorn, Alpes suizos
Es un conjunto de valles, montañas y glaciares que se encuentran entre el valle de Grindelwald, en el cantón de Berna, por el norte y el valle del río Ródano por el sur. En este lugar, nada menos que nueve cimas sobrepasan los cuatro mil metros de altura y además se encuentra el glaciar más grande de Europa. Es una zona perfecta para estudiar los glaciares ya que es fácil encontrar picos con forma de cuerno, valles en U y morrenas, así como rocas cristalinas de hace más de 400 millones de años.
Fiordo Nærøyfjord, Noruega
Es un fiordo (una estrecha entrada de mar formada por la inundación de un valle) de unos 17 kilómetros de largo situado en la costa occidental de la península escandinava, cerca del sur, en aguas del mar del Norte y a unos 240 kilómetros al noroeste de Oslo. El mayor aliciente turístico es navegar por él en un crucero para ver sus cimas nevadas, las caídas de agua y las pequeñas granjas asentadas en las laderas de las montañas.
Meteora, Grecia
Los monasterios ortodoxos de Meteora, en los valles de Tesalia, cerca del río Pineios y de las montañas Pindus, en el centro de Grecia. Allí permanecen suspendidos en el tiempo y en la roca de las montañas. De hecho, su nombre significa literalmente “suspendido en el aire”. Sujetos de manera casi mágica sobre farallones de arenisca, estos seis recintos religiosos datan del siglo XIV y transmiten el equilibrio entre la naturaleza y el hombre, entre lo humano y lo divino.
La laurisilva de Madeira, Portugal
Espacio natural declarado Patrimonio de la Humanidad por la Unesco en 1999, se trata de una valiosa reliquia por su tamaño y calidad de la laurisilva, un bosque de laurel que era muy abundante en otras épocas, incluso en el pasado estaba muy extendido por Europa, y que hoy está prácticamente extinguido. Se trata pues de un centro de biodiversidad de plantas y flores y con una fauna invertebrada muy rica.
Calanques de Piana, Córcega
Esta es una de las muchas perlas del Mediterráneo y está situada en la costa oeste de la isla francesa, entre Ajaccio y Calvi, en el golfo de Girolata, e incluye y la reserva de Scandola. La palabra corsa calanque significa cala y es una formación geológica similar a un valle profundo, con sus laderas inclinadas y de piedra caliza, parcialmente sumergida en el agua. Una especie de fiordo mediterráneo. Fue declarado Patrimonio de la Humanidad por la Unesco desde 1983.
Parque de Bialowieza, Polonia
Es uno de los últimos parques primarios de llanura que queda en Europa y en donde todavía sobreviven en libertad numerosos ejemplares de bisonte europeo, los mamíferos terrestres salvajes más grades del continente. Su fauna y su flora son sus principales atractivos, ya que están muy protegidos. Administrativamente se encuentra dividido entre Polonia y Bielorrusia y separado por una valla que impide el paso de animales y turistas. Ambos países explotan turísticamente, aunque de forma diferente. La parte polaca fue declarada Reserva de la Biosfera por la Unesco en 1976 y Patrimonio de la Humanidad tres años más tarde. La zona bielorrusa recibió la misma calificación en 1993.
Valles y montes de la región de los Dolomitas
Situada en los Alpes Orientales, este territorio italiano se extiende a las provincias de Belluno, Bolzano, Trento, Udine y Pordenone y se caracteriza por sus amplios y profundos valles cubiertos de una espectacular vegetación. Bosques que se alternan con verdes prados dominados por numerosos y solitarios macizos montañosos que se levantan cientos de metros en vertical sobre este paraje único. En 2009 la Unesco declaró la zona Patrimonio de la Humanidad considerando la belleza de su paisaje, la variedad de sus relieves, su riqueza fluvial, con numerosos lagos, fuentes y ríos, y su interés turístico.
Parque Natural de Plitvice, Croacia
Un paraje de cerca de 30.000 hectáreas, de las que unas 22.000 están cubiertas de bosques y dominado por dieciséis lagos de aguas de color turquesa, transparentes y puras, interconectados entre todos ellos por un sinfín de cascadas y torrentes, y rodeados por densas arboledas de abetos, hayas y pinos. Un espectáculo fluvial y un refugio para la flora y su particular fauna, como el oso pardo europeo, el águila, el lobo, el gato montés, el urogallo y otras especies más comunes.
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