Desierto del Sáhara
Viaje a la puerta del Sáhara en Marruecos
Si buscas un destino impactante e inusual tienes que descubrir la puerta del Sáhara en Marruecos, te sorprenderá el desierto... y también sus oasis.
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Hay rincones de la naturaleza que nos atraen como si tuviesen un imán, no nos referimos a lugares paradisíacos con los que soñamos todo el invierno y a los que querríamos ir a para no regresar de ellos nunca jamás sino a lugares que despiertan en nosotros gran curiosidad y que deseamos ardientemente visitar, al menos, una vez en la vida. Algo así nos sucede con los desiertos y, si eres de los que ya ha caminado alguna vez sobre la arena del desierto, seguro que entiendes a qué nos referimos…
Su infinitud nos abruma, no ver nada más que arena a nuestro alrededor nos impacta y llegamos a comprender, aun sabiendo que estamos fuera de todo peligro y que la civilización nos espera tras la siguiente duna, las malas pasadas que puede llegar a jugarnos la mente regalándonos espejismos, visiones que no existen pero que nuestros ojos parecen empeñarse en ver.
Si quieres descubrir cómo es de verdad un desierto no tienes que ir muy lejos, basta que te acerques a alguna de las puertas del Sáhara, la de Túnez, de la que hablamos no hace mucho, puede ser una pero hoy te proponemos otra, la de Marruecos porque visitar el Sáhara marroquí es vivir una experiencia tan aventurera como inolvidable, sólo tienes que elegir cómo quieres recorrer el desierto del Sáhara: en camello, a pie, en 4x4 o en quad.
Puedes salir de Marrakech o de Ouarzazate, desde ambas localidades hay rutas en 4x4 que recorren los lugares mágicos del gran Sur: el Valle de Dades o el del Draa con sus famosos palmerales que debe a las aguas del río del mismo nombre que desciende desde las montabas del Alto Atlas y crean una vega fértil de unos 200 kilómetros o la ruta de los 1000 Kasbahs con su Valle de las Rosas; oasis y aldeas con kasbahs de adobe se suceden antes de darnos entrada al magnífico desierto del Sáhara; una recomendación: no puedes negarte una visita al pueblo de Merzouga, un rincón perdido en medio de la arena en las mismas puertas del Sáhara, forma parte de las rutas de muchos turistas por el desierto porque cuenta en el mayor cuerpo natural de agua de Marruecos y es, además, el pueblo más famoso de Erg Chebbi -la zona arenosa del Sáhara en Marruecos, su puerta marroquí-.
Podrás perderte (no literalmente, por supuesto) entre las dunas más altas de Marruecos, palmerales, pistas y rutas de senderismo, podrás también disfrutar del que, dicen, es el amanecer más bello del mundo (el del desierto de Sáhara) y podrás también descubrir el lago Dayet Srij (que no todo va a ser arena…), una gran balsa de agua famosa por la visita regular de aves en sus migraciones.
El desierto tiene algo de hipnótico, un atractivo incomparable y sobrecogedor al que no podrás resistirte y que podrás disfrutar, más que en ningún otro rincón de la tierra, en la puerta del Sáhara en Marruecos que es, además, la entrada más segura y accesible a este magnífico desierto africano.
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