Pasarelas, campañas, backstage, viajes... Parece un sueño, pero esconde un peaje que Beatriz Fernández tuvo que pagar. "Sí, he vivido un abuso sexual. Decir esto me costó muchísimo tiempo", nos confiesa la modelo.
Porque tras el mundo idílico de la moda hay muchos traumas ocultos. "Que un fotógrafo te toque, o que abuse de su poder para hacer que te desnudes o tocarte, tiene unas consecuencias bestiales a nivel psicológico".
"Tenía una talla 34 y me exigían adelgazar"
Exigencias de medidas que muchas veces provocan trastornos alimenticios. "Tenía una talla 34 y me exigían adelgazar", recuerda. Experiencias que no sabes gestionar, sobre todo cuando eres una chica joven y vulnerable que camina sola por la pasarela de la moda. "Hay una manipulación bestial que hace que, como víctima, te sientas culpable de haber provocado esto", cuenta Beatriz Fernández.
Verbalizar como terapia
Situaciones que se están empezando a visibilizar gracias a movimientos como el #MeToo, que sacan a la luz episodios oscuros que ha costado mucho tiempo verbalizar.
Para Fernández, su forma de liberación fue la escritura que utiliza como terapia. Así surge 'Desfiladero', la historia de Lucía y la de muchas chicas que, por alcanzar su sueño, callan y pasan por alto situaciones de abuso o presión que no deberían normalizar. "Que verbalicen y que lo cuenten, porque yo me callé muchas cosas y esto ha sido gran parte de mi sufrimiento", aconseja la autora.
"Tenía miedo a hablar, a que me echaran, a que me juzgaran"
Un libro duro de escribir para ella, que tuvo que revivir sus traumas y trastornos alimenticios para denunciar lo que sucede en la industria. "Escribía y temblaba. Tenía muchísimo miedo a hablar de esto, a que me echaran del trabajo, a que me jugzgaran".
Pero gracias a este libro, con la cabeza alta y un pie delante del otro, ha conseguido salir del abismo, del desfiladero de la moda.