Alejandra G. Remón
Editorial: Lunwerg Narrativa
Año de publicación original: 2024
La realidad como un estado de cambio permanente. Mudanzacuenta la historia de su protagonista, Fabiola, en un momento transcendental de su vida. Las emociones, los recuerdos y el temor a la incertidumbre se entrelazan en un relato intenso y sugerente sobre la importancia de las conexiones que hacemos con las personas y los objetos que nos rodean.
Una narración intensa y evocadora que te lleva a reflexionar sobre la importancia de la vida, a través de las relaciones de su protagonista con amigos, familia y aquellas pequeñas cosas compartidas que nos hacen ser quienes somos.
Somos quien quieren que seamos
La vida de Fabiola parecía ir sobre ruedas, su taller de moda nupcial estaba en su mejor momento, incluso aparecía en las páginas de las revistas más prestigiosas del sector. Su casa parecía una de esas casas de Pinterest, con la que todas hemos soñado alguna vez. Su pareja era idílica…
Con los recuerdos empapando el vacío de aquella casa compartida con su expareja, Fabiola decide escribirle una última carta
Y de pronto E, como a ella le gustaba llamarle, su novio, con el que había compartido los últimos seis años, con quien quería formar una familia, decide poner fin a su poética relación. Sin opción a que Fabiola pueda entender algo, como si de un monólogo se tratara.
La protagonista tiene que mudarse de casa porque ella sola no puede hacer frente a los gastos que el hogar en el que vivían los dos le supone. Con los recuerdos empapando el vacío de aquella casa y cajas llenas de momentos, de canciones… decide escribirle una última carta, una despedida.
El vértigo de una nueva vida
La novela transcurre durante la mudanza y todo lo que conlleva. El cambio y sus emociones, la tristeza, la pena, la rabia o la incertidumbre. Con el apoyo de su familia, salpicada también de alguna discusión porque quien mejor te conoce a veces te tiene que tirar de la manga, y de la gente que sí la quiere, Fabiola se vuelve a construir, se compra una casa, y de igual modo que el Fénix, comienza su nueva vida.
Un nuevo camino en el que se dará cuenta de que no necesita a nadie ni nada de lo que tenía para ser feliz. Porque en realidad no lo era, simplemente estaba siguiendo los cánones que la vida nos impone. Y justo en ese momento, cuando por fin es quien quiere ser, recibe lo que tanto había ansiado desde que le rompieron el corazón,
La respuesta a aquella carta, escrita desde el dolor de no poder ser quien los demás querían que fuese. Pero ya no la leerá, porque ha cambiado su piel, ha mudado.
Cuando se cierra una puerta siempre se abre otra, o una ventana o la puerta que da al jardín
Alejandra G. Remón, que había publicado varios libros en los que mezclaba arte, poesía y collage, ofrece, en esta su primera novela, una prosa que te envuelve en la atmósfera de Fabiola, una mujer empeñada en ver la creatividad como un camino para la esperanza. Mudanzas invita a cavilar sobre la vida y la identidad personal. Una novela para emocionarse y proponer nuevas formas de relacionarse con el mundo.
Para todas aquellas mujeres que no ven salida. El personaje de Fabiola motiva la reinvención, porque cuando se cierra una puerta siempre se abre otra, o una ventana o la puerta que da al jardín.
Lunwerg abre una puerta a la ficción
Con este título y Cuando se rompa el suelo, de Elene Ballvé, Lunwerg, una editorial que hasta ahora estaba dedicada a los libros ilustrados y los ensayos, abre una nueva colección de ficción. Una línea de títulos que surgen en busca de nuevos lectores, con obras escritas por y para las nuevas generaciones.
Una colección muy implicada con nuevas sensibilidades, enfocada a los temas que preocupan a una generación que se abre paso en el mundo adulto, buscando autores poco conocidos a los que poder ofrecer una plataforma de difusión y sobre todo, estilos originales como el de Alejandra G. Remón, evocador y reflexivo.