Sara Barquinero
Editorial: Lumen
Año de publicación original: 2024
Hay algo tramposo en hablar de una novela generacional, en sepultar una obra tras la más pura mercadotecnia. Más aún cuando se trata de un libro de 800 páginas que no viene precedido de fuertes campañas de marketing en marquesinas y autobuses ni de un tráiler cinematográfico potente (algo cada vez más común en el mundo editorial y digno de estudio). Tan solo una anticipación muy comentada que llama poderosamente la atención: una autora de 30 años editando un extenso libro en el que ha trabajado los últimos siete.
Llama la atención una autora de 30 años editando un extenso libro en el que ha trabajado los últimos siete
Sin embargo, entre el marketing y la provocación se pretende anunciar una novela larga como un ejercicio provechoso para el lector. Prometernos que algo más, y no solo el placer de leer, nos estará esperando cuando asumamos la contingencia de levantarlo sobre nuestras narices; antes de ir a dormir o en el metro, mientras ponemos en riesgo al resto de pasajeros; blandiéndolo sobre la cabeza de quienes tengan la mala suerte de compartir trayecto con nosotros y nuestro 'mamotreto'.
Con Los Escorpiones, el último libro de la escritora Sara Barquinero, la editorial Lumen fue un paso más allá, añadiendo en la faja los nombres de David Foster Wallace o Roberto Bolaño. Además de la antes mencionada 'generacionalidad' que afirmaba esta vez Elizabeth Duval, con el convencimiento, quizás, de que se le añadía un valor extra a este libro tan extenso al compararlo con otros de longitud similar.
Si a esto le sumamos la antes mencionada anticipación con la que se anunciaba, el ejercicio se convertía en el doble de riesgoso. En pocas semanas han sido varios los críticos que se han atrevido a especular sobre los 'retales' del texto, por dónde se podría cortar o se deberían reducir sus 800 páginas. Ejercicio curioso del que lee, que de hacerlo en su versión ebook quizás pueda ahorrarse el confeti presionando un par de botones hasta llegar a su versión deseada. El 'hágaselo usted mismo' de la literatura está cada vez más cerca para algunos, no cabe duda.
Foros y repúblicas fascistas
Sin embargo, Los Escorpiones es un libro con un afán literario que resulta refrescante y que apuesta por la novela, sin necesidad de ir precedida de premios, huyendo de la autoficción tan habitual en la última década.
Sus personajes entremezclan sus vidas con un misterioso grupo que, a través de la música, induce a un estadio de trance y desconexión a sus víctimas que las acerca al suicidio. Nadie conoce la verdadera naturaleza de la organización, unas veces parece surgir de poderosas familias vinculadas al crimen; otras, no es más que una cortina de humo que esconde intenciones mucho más macabras.
La autora se sumergió durante años en una comunidad de suicidas en la deep web para escribir esta novela
El rastro de esa organización comienza en ese ejercicio extraño de política platónica que fue la república de Fiume, en los albores de la Italia fascista. Desde ahí Barquinero empieza a plantear un argumento que vincula el ascenso del fascismo con experimentos relacionados con el control mental a través de la música.
Desde el presente, sus protagonistas, Sara y Thomas, se verán absorbidos por los posts de una comunidad de suicidas en la deep web (real, por cierto, y en la que la autora se sumergió durante años para escribir esta novela). Los mensajes de los usuarios empezarán a apuntar en la dirección de una tenebrosa familia de la aristocracia italiana.
Los artífices de aquella música se convertirán en una obsesión para quienes no pueden parar de buscarla, con la esperanza quizás de dar un vuelco a sus propias vidas. Ellos serán los encargados de darle entidad a quien es difícil otorgar un rostro y, sobre todo, una motivación a sus experimentos.
Diarios, post, novelas
Su autora juega con un puzle de historias deslavazadas, creepypastas, leyendas oscuras que construyen los propios usuarios y que conforman un canto coral de autoría siempre difusa. Barquinero compara estas creaciones nacidas en la red con los textos homéricos, esfuerzos conjuntos donde la colectividad pone al servicio de la literatura sus anhelos y miedos.
El argumento de 'Los Escorpiones' se permite correr en muchas direcciones y épocas
Salvando las distancias, claro, aunque con esta premisa en mente, el argumento de Los Escorpiones se permite correr en muchas direcciones y épocas. E incluso multiplicando formatos, solapando historias y textos. En el interior del libro encontramos así varias novelas y documentos que se suman a un rastro que genera en el lector la misma excitación que sienten sus protagonistas.
Las voces de los diferentes personajes dibujan un complejo tapiz de sospechas y anhelos con respecto a la naturaleza real de la misteriosa organización, en una huida de sus propias adicciones, trastornos y de un pasado que les empuja a buscar esa melodía. Persiguiéndoles por las páginas, alimentaremos una necesidad morbosa por saber qué se esconde tras Los Escorpiones. Y seremos testigos de cómo irán alejándose de su propia vida al son de una melodía perversa a la que es difícil resistirse cuando hay poco que perder.