Domingo Villar

Editorial: Siruela

Año de publicación original: 2023

Sinopsis: Víctor Morel escribió Síbaris. Una obra que rompió moldes y le convirtió en el escritor con más proyección del panorama literario. De eso han pasado casi 20 años. Ahora, Víctor es un autor en perpetua crisis que lleva desde la salida de su ópera prima intentando alumbrar otra obra. Sería la que recogiese aquel éxito y le confirmase como un autor excelso. No está ni cerca de conseguirlo y encima su gato, Capone, ha desaparecido.

Víctor tiene que tomar una decisión. Necesita dinero para poder mandar a su hija la universidad pero este sólo llegará si termina su nuevo libro. Entonces, una solución descabellada pasará por su mente. Una con la que podría arreglar todos sus problemas menos uno: Capone sigue sin aparecer.

Por qué recomendamos 'Síbaris', de Domingo Villar

A Villar se le conoció, sobre todo, por cultivar la novela negra. Las escribía en gallego y luego se traducían a muchos otros idiomas. Lo que no era tan conocido es que a Domingo Villar le gustaba mucho el teatro. Verlo, por supuesto, pero también escribirlo. Fruto de esa pasión nace esta obra. Un libreto para el que el propio Domingo se había reservado un papel. Síbaris, que terminó de escribir en 2021, es una función deliciosa en la que se mezcla el humor más fino y la sorpresa. El absurdo deja espacio también a una delicada crítica en la que se señala cómo el capitalismo está matando el arte.

Acabamos de mencionar que la sorpresa está muy presente aquí. E insistimos, porque no es una sola. Son varias y todas igual de capitales. Unas hacen que cambie el rumbo de la historia. Otras, sugeridas, nos producen una sonrisa socarrona y triste a la vez pero totalmente necesaria. Nos obligan prácticamente a seguir leyendo. Nos incitan a querer saber qué va a ocurrir en la siguiente página.

Pero, argumento aparte, Síbaris encandila por sus personajes y por sus afilados diálogos. Se nota la maestría con la que Villar remataba las conversaciones de sus novelas policiacas. En esta obra que nos ocupa, esa maestría está en cada interjección, en cada reproche, en cada pregunta. Sus personajes pueden parecer algo estereotipados: el autor desencantado, la mujer hastiada, el representante interesado... pero no. Una vez arranca la lectura, nos damos cuenta de que hay más. Mucho más.

Enredos, gags, situaciones rocambolescas y un sueño final en el horizonte. Síbaris es el objetivo. El lugar definitivo al que llegar y en el que quedarse para descansar de por vida. Y si esta fuese la obra en la que nos tuviésemos que quedar para siempre, no nos quejaríamos. Pero no. Todavía nos quedan muchos libros en los que cobijarnos aunque, qué suerte, el poder acudir a Síbaris siempre que queramos.