Editorial: Planeta

Año de publicación original: 2025

Un viaje al abismo moral con vistas al canal de la Mancha. Así podría describirse El esplendor, el último thriller de Agustín Martínez. ¿Y quién es este señor? Pues, además de guionista y escritor, es una de las mentes detrás del fenómeno Carmen Mola. Sí, ese trío que revolucionó la literatura negra española y se llevó el Premio Planeta 2021. Pero aquí, Martínez vuela solo y lo hace con una historia que mezcla crimen, mentiras y los ecos oscuros de la Segunda Guerra Mundial.

César y Rebeca son el tipo de pareja que sobrevive con astucia y pocos escrúpulos: él, proveedor de "fiesta" para clientes VIP; ella, una cazadora de herencias de fallecidos sin testamento. Todo iba bien, o al menos todo lo bien que les podía ir, hasta que Rebeca regresa de un viaje en un estado catatónico, con señales de agresión y algo que parece un grito atrapado en su garganta. ¿Qué demonios pasó?

César, con más preguntas que certezas, se lanza a una búsqueda que lo lleva a una pequeña isla en el canal de la Mancha. ¿La postal? Un escenario desolador, marcado por los restos del muro atlántico que Hitler intentó levantar y que esconde una de las historias menos conocidas de la Segunda Guerra Mundial.

Alderney, la isla de Hitler

Lo interesante de El esplendor no es solo el misterio que plantea (que ya de por sí engancha), sino cómo Martínez entrelaza los horrores del pasado con las miserias del presente. El lujo de las élites y su capacidad para operar al margen de la moralidad se enfrentan aquí con un horror más tangible: campos de concentración nazis en suelo británico. Sí, existieron, y en este libro son tan reales como las grietas de los personajes.

El gobierno británico, centrado en la defensa de su territorio, abandonó a su suerte a las pequeñas islas del canal. Jersey, Guernsey o Alderney fueron tomadas sin resistencia ninguna por las tropas nazis. Allí instalaron defensas y fortificaciones gracias a la mano de obra esclava que les proporcionaban presos soviéticos, judíos franceses y republicanos españoles.

La ambientación es una de las joyas de la novela

Instalados en el desconocido campo de concentración de Lager-Sylt, en la isla de Alderney, miles de españoles (el número concreto ha sido objeto de amplios debates) murieron tras ser esclavizados por los nazis. En este contexto histórico se inspira Agustín Martínez para contarnos una historia de amor y perversión moral.

La ambientación es una de las joyas de la novela. Martínez nos lleva de la mano por escenarios donde el mar ruge como un animal y las fortalezas abandonadas parecen vigilar un secreto. Y el contraste es brutal: paisajes sobrecogedores frente a lo más bajo del ser humano. Es un libro que, como los de Carmen Mola, no teme ensuciarse las manos ni hurgar en las sombras de la historia.

Dos personajes, un rompecabezas

Y luego están los personajes. César, el antihéroe imperfecto, es un tipo que no te caería bien en una fiesta, pero al que sigues por la curiosidad de saber hasta dónde llegará. Rebeca, por su parte, es el enigma que desencadena esta espiral de caos y oscuridad. Ambos funcionan como piezas de un rompecabezas que, mientras se arma, no deja de sorprenderte.

Martínez escribe como si cada palabra tuviera que dejar una marca

Por último, hablemos de estilo. Martínez escribe como si cada palabra tuviera que dejar una marca. Hay algo de crueldad en cómo describe ciertas escenas, pero también una precisión quirúrgica. Es un autor que no subestima al lector y que sabe mantener el suspense justo cuando crees haberlo descifrado todo.

El esplendor no es un thriller más. Es una invitación a mirar el lado más oscuro de la historia (y de nosotros mismos) sin pestañear. Una novela que te hará cuestionarte si, al despojarnos de la moral, no estamos todos a un paso de convertirnos en monstruos.

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