Salud mental

Así paralizó la salud mental a Eva y Fernando, que encontraron su mejor medicina en el trabajo: "Que cuenten contigo te hace sentir fuerte y segura"

Eva y Fernando, gracias al trabajo, han conseguido tener una segunda oportunidad en sus vidas, limitadas por enfermedades relacionadas con la salud mental. "Que cuenten contigo te hace sentir fuerte y segura", afirma ella.

La salud mental de Eva y Fernando paralizó sus vidas: así fue como el trabajo se convirtió en su mejor medicina

El absentismo laboral por enfermedades comunes se ha duplicado en España en una década y supone casi el 80% de los casos. Pero en los últimos tiempos también aumentan los casos relacionados con la salud mental y emocional de los equipos, aunque en ocasiones el trabajo puede ser también parte de la salvación.

Eva Herrera tiene 52 años, desde hace cinco está diagnosticada como ansiodepresiva. "Me sentía mal, sentía que me ahogaba, que tenía muchas ganas de llorar y con mucha tristeza", relata.

Tras años sin trabajar por su enfermedad, ahora es coordinadora de teleasistencia. Esto ha provocado que su vida diera un giro radical. Así nos lo ha contado ella misma: "El simple hecho de que cuenten contigo para algún desempeño laboral te hace crecer, te hacer ser más fuerte y segura". A esto se suma que le reporta una "estabilidad mental", que para ella es "muy importante".

En UNEI, una empresa andaluza, conocen bien el problema. Es por ello que buscan empleo para las personas que sufren algún tipo de enfermedad mental. "La sociedad necesita ejemplos", dice Inma Ponce, directora de marketing de UNEI, la empresa que quiere demostrar que las personas con enfermedades mentales son "igual de capaces que cualquier otra".

Fernando Benavides es otro ejemplo. Trabajaba como vigilante de seguridad, pero su enfermedad le apartó del mercado laboral de un plumazo. Empezó a no querer salir, ni relacionarse con nadie; esto le limito tanto su vida hasta el punto de que su "única meta diaria era estar en casa", concretamente metido en "la cama". Tras mucha terapia ahora es programador informático.

Tanto Eva como Fernando han conseguido romper tabúes gracias a sus nuevas labores. Ahora su mensaje es claro: "El trabajo me ha salvado la vida".