El aumento de casos de niños conbronquiolitisen España desde finales de octubre ha colapsado las unidades pediátricas de los hospitales, ya que entre un 15% y un 20% necesitan ser ingresados. Según los últimos datos, esta infección respiratoria está afectando especialmente a los menores de entre 0 y 4 años.
¿Cómo detectarla? Según ha explicado a laSexta la Dra. Inmaculada Bodegas, pediatra del Hospital Universitario Quirónsalud Madrid, los síntomas al principio son muy similares a los de un catarro o resfriado. Hay que alarmarse cuando:
- Escuche ruidos o pitidos en el pecho.
- Detecte que respira con dificultad. Si ve que se le hunde la zona de las costillas produciéndole problemas para respirar.
- Si ve que el bebé tiene fiebre muy alta o persistente en el tiempo.
- Cuando observe que el pequeño está más adormilado de lo normal.
- Si sufre apneas de 3 a 4 segundos.
- O si come mucho menos de la cantidad habitual o vomita de forma permanente.
¿Qué no hay que hacer? La pediatra Inmaculada Bodegas ha aclarado a laSexta las actuaciones que no son recomendables en caso de que nuestro hijo sufra una infección de bronquiolitis.
- No darle antibióticos.
- No recomienda usar antitusivos porque precisamente lo que hay que hacer es favorecer la tos. Tampoco expectorantes, mucolíticos ni anticatarrales pues no tienen eficacia probada y sí efectos secundarios.
- Evitar los espacios con humo y favorecer los espacios abiertos.
¿Cómo actuar en casa? La pediatra Inmaculada Bodegas también ha explicado a laSexta las claves para atender en casa a los menores enfermos que no requieran ingreso hospitalario.
Más Noticias
Qué es la tuberculosis activa, cuáles son sus síntomas, cómo se contagia y cómo se cura
El aumento de casos de sarampión obliga a los pediatras a adelantar la segunda dosis de la vacuna para asegurar una "protección temprana"
Estas son las consecuencias de no tener una Agencia de Salud Pública en España, según los científicos
Por qué es importante estar triste: "La obsesión con la felicidad puede volverse una mochila muy pesada"
Vuelve el sarampión: la vacuna es la mejor protección frente a esta enfermedad vírica y (muy) contagiosa
- Es muy importante hacer lavados nasales para ayudar a eliminar la mucosidad. Mantener la vía aérea limpia lavando la nariz con suero salino fisiológico que facilite la expulsión de secreciones.
- Mantenerlos bien hidratados con tomas frecuentes, fraccionadas y sin forzar. Proporcionarles mucho líquido. Agua o si es lactante, leche.
- Tener al lactante, en la medida en la que se pueda y el mayor tiempo posible, semi incorporado para favorecer la respiración. Unos 20 o 30 grados sobre la horizontal. Colocar una almohada fina debajo del colchón o cualquier elemento que le mantenga ligeramente incorporado sobre todo en el momento de dormir.
- Si tiene fiebre, darle antitérmicos, no abrigarle en exceso y consultar siempre a su pediatra si la fiebre es muy alta o no cesa. Si considera que aumenta su dificultad al respirar, suministrar aerosoles siempre bajo prescripción médica.
Para nota. Las bronquiolitis suelen durar de una a dos semanas aunque a veces, los síntomas pueden tardar varias semanas en desaparecer.