La actual dirección del PSOE quita hierro a las críticas de la vieja guardia del partido ante una posible ley de amnistía. Nada de lo que se negocie, aseguran, va a vulnerar la Constitución.
Los socialistas no creen que las críticas de antiguos dirigentes a una posible amnistía cuenten con el respaldo de su electorado ni tampoco que respondan a una masa crítica dentro del partido.
Estos reproches han sido verbalizados este jueves porAlfonso Guerra. "Me rebelo contra eso, esta amnistía es la condena de la Transición", ha indicado en una entrevista en la COPE. Así, ha pedido como "ciudadano demócrata y socialista" a Pedro Sánchez que no acepte la amnistía que exige Puigdemont para poder negociar una investidura.
Fuentes del PSOE a laSexta aseguran que "echan de menos un voto de confianza" de figuras comoFelipe González o el propio Guerra. Pero en público, evitan el enfrentamiento y se limitan a expresar respeto.
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No obstante, otro dirigente socialista, el exministro Ramón Jáuregui, ha señalado que este escenario "abre una puerta peligrosa a otras situaciones semejantes", asegurando que esto supondría "la legalización encubierta de actos contra el Estado y un reconocimiento a la unilateralidad". Además, Jáuregui ha recordado que no hace tanto tiempo Sánchez defendía que una amnistía nocabía en la Constitución.
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