El estreno de Alberto Núñez Feijóo en el Congreso de los Diputados no ha sido especialmente bueno para sus intereses. El líder del PP visitaba por primera vez la Cámara Baja como diputado electo y lo hacía para librar una primera gran batalla: la presidencia del Congreso.

Su candidata, Cuca Gamarra, no solo no ha concitado los apoyos necesarios para lograrlo, sino que ni siquiera han recibido el apoyo de Vox para imponerse a una Francina Armengol que sí que ha logrado la mayoría absoluta para resultar elegida.

Esta sorpresa ha llevado a Feijóo a convocar a miembros del Comité de Dirección del PP en la sede de Génova para evaluar lo ocurrido con su núcleo duro, conformado por la propia Gamarra, Elías Bendodo o Miguel Tellado. Y es que ese plantón de Vox ha provocado un notable enfado en el líder del PP, según ha desvelado 'El Español', que no sabía que Vox le daría la espalda en una votación que marca la futura legislatura.

Es más, según ha confesado el vicesecretario de Cultura y Sociedad Abierta del Partido Popular, Borja Sémper, Vox había dicho al PP que votarían a favor de Gamarra, lamentando que luego hayan hecho "otra cosa diferente". "No teníamos conocimiento, pues sí que había manifestado que iba a votar a Cuca Gamarra y luego ha hecho otra cosa diferente. Está en su perfecto derecho", explica.

"Feijóo sale más debilitado porque entró con unos apoyos y sale con otros". Esa frase no la ha dicho Pedro Sánchez, sino un Santiago Abascal que ha lamentado que el PP no les cediese ningún puesto en la Mesa, apoyando a su candidato, Ignacio Gil Lázaro, en señal de protesta.

"Es la segunda vez en democracia que la tercera fuerza parlamentaria no está representada en la mesa y, ante esa falta de voluntad del Partido Popular, Vox vota a su candidato a la presidencia y a la vicepresidencia. En ambos casos, Ignacio Gil Lázaro", aclararon, una decisión que le trasladaron al PP en la misma mañana de la votación.

El líder del PP, Alberto Núñez Feijóo y la secretaria general de la formación, Cuca Gamarra, durante la sesión constitutiva de las Cortes Generales de la XV Legislatura.

No obstante, horas después, la formación de ultraderecha emitió un comunicado en el que matizaban notablemente este tono de sorpresa y desaprobación, a modo de reprimenda, por otro más abierto al diálogo. Así, Vox "apoyará" a un Gobierno que suponga "una alternativa que mantenga el respeto a la nación y la recuperación de la neutralidad de las instituciones".

"Vox no será la excusa de nadie ni el impedimento para evitar un Gobierno de quienes pretenden destruir los fundamentos de la Constitución", han advertido. Este doble discurso ha chocado frontalmente con un PP que ve completamente condicionadas sus opciones en una posible investidura de Feijóo.

Este viernes, la presidenta del Congreso, Francina Armengol, se reunirá con el rey Felipe VI para trasladarle la correcta constitución de la Mesa. Tras este momento protocolario, comenzará la cuenta atrás para que el monarca comience su ronda de consultas y decida quién debe ser el candidato a la presidencia del Gobierno, una carrera para la que parece que Pedro Sánchez cuenta con más apoyos que Feijóo.

Este escenario supone el primer varapalo de Feijóo tras ganar las elecciones, una dura realidad en la que ha comprobado que puede no contar con apenas apoyos más allá de un Vox que ya ha marcado distancias con el PP.

La otra cara de la moneda: Armengol y el PSOE, grandes ganadores

La diputada socialista Francina Armengol, elegida presidenta del Congreso de los Diputados

Lejos de darse una votación ajustada en el Congreso, la mañana de este jueves también ha sido sorprendente al ver a Armengol elegida como presidenta de la Mesa de la Cámara Baja por mayoría absoluta. Con 178 'síes', el PSOE ha dado un golpe sobre la mesa y una demostración de poder que acerca la Moncloa a Pedro Sánchez.

El líder de los socialistas no ha hecho valoraciones en un día redondo para él y para su partido, con el resto de fuerzas que han respaldado a Armengol de unas negociaciones que se han alargado al máximo. Uno de los grandes titulares ha sido el reconocimiento del catalán como lengua oficial en la Unión Europea, así como del euskera y el gallego.

La segunda noticia ha venido de ahí precisamente, de la entrada de las lenguas cooficiales al Congreso por primera vez en la historia del Congreso. Armengol ha trasladado su "compromiso" con la "riqueza lingüística" del país: "Defender la democracia parlamentaria, y esto es lo que nos corresponde a todos nosotros, es preservar y respetar la diversidad que convive en nuestro país y que las urnas han llevado hasta aquí".

Así las cosas, el primer gran 'round' político de la XV Legislatura deja a un Feijóo más débil que ayer para afrontar la investidura pese a haber ganado las elecciones y a un Sánchez que podría estar más cerca de mantener la presidencia del Gobierno.