Como si se tratara de un ritual que se repite cada 22 de diciembre, multitud de personas se han congregado a las puertas del Palacio Real por el sorteo de la Lotería de Navidad.
Entre ellos está alguien a quien le tocó un décimo, a Pilar le tocó el Gordo en 2007, el último año en el que no había que pagar nada a Hacienda. "Sentí mucha felicidad cuando me tocó porque estaba muy repartido en diferentes papeletas", recuerda. Además, cuenta que lleva horas esperando en la cola para entrar a ver en directo el sorteo.
Además, un grupo de amigos disfrazados bromea con la Lotería. Uno de ellos grita: "Me ha tocado el Gordo", mientras, su amigo le toca.
El 22 de diciembre es un día de celebración para los agraciados con los premios de la Lotería de la Navidad, pero también para la reivindicación.