Un cura de la localidad alemana de Ballenstedt ha reconocido que gastó 120.000 euros procedentes de fondos parroquiales en una lotería fraudulenta por Internet, según ha informado la diócesis de Magdeburgo.
"Me dejé engañar por estafadores en Internet. Me dejé convencer y les transferí dinero en varias ocasiones", reza la declaración del religioso, de 64 años, que se ha entregado ante la Policía por un delito de fraude y ha confesado ante el obispo Gerhard Feige.
Una portavoz eclesiástica también ha confirmado que el sacerdote explicó lo sucedido a los feligreses durante una misa. "Me da muchísima pena haber traicionado su confianza de esta forma", lamentó, antes de comprometerse a devolver todo el dinero. La parroquia tiene pendiente decidir si el cura puede continuar en el puesto de párroco que asumió en 2010.