Los participantes sueñan con que sus terminaciones de la Lotería de Navidad se depositen en ellas (aunque muchos no lo sepan): las tablas del sorteo navideño. Todos los números que estén colocados en este instrumento de madera, ya sea durante o después del sorteo, habrán sido galardonados con algún premio del 22 de diciembre. Esto implica que, previamente, han sido extraídos del bombo de los números, cantados por los niños y niñas de San Ildefonso e introducidos en los alambres de las tablas.
Estas tablas también sirven para marcar el turno de los cantantes de la Lotería. Al finalizarse cada tabla, los cuatro pequeños (los dos que extraen las bolas y los otros dos que entonan y colocan los premios) abandonan el escenario para dar paso a otros cuatro estudiantes. Esto quiere decir dos cosas. La primera: hay tantas tablas como grupos diferentes de niños que participan en el sorteo. La segunda: el sorteo no finaliza hasta que todas las bolas, que estaban en los bombos, están colocadas en las tablas. ¿A qué hora ocurre eso?
Teniendo en cuenta que en el sorteo de la Lotería de Navidad hay diez tablas y que cada una de ellas tiene 10 alambres con 200 bolas de cada clase (premios y números) cada uno, se podría calcular que los pequeños tardan en cantar cada una de ellas unos 20 minutos aproximadamente. Eso sí, este tiempo puede variar. Hay tablas que puede durar más y otras menos, pues depende también de la velocidad con la que los pequeños entonen los premios. También influye la cantidad de premios gordos que repartan cada uno de ellos, pues cada vez que aparece uno de ellos (el Gordo, el segundo, el tercero, los dos cuartos o los ocho quintos) los niños de San Ildefonso deben seguir el protocolo y enseñar a la mesa presidencial y a las cámaras las bolas extraídas antes de continuar. Con el resto de los premios más pequeños solo los cantan y los colocan en los alambres.
Con todo ello, si multiplicamos los 20 minutos - que se tarde en cantar aproximadamente cada tabla - por las 10 tablas que hay en el sorteo, obtenemos que la extracción de bolas dura tres horas y media. Pero si no queremos pillarnos los dedos (por eso de que algunos niños se emocionan al cantar o aprovechan para recordarse cuánto se quieren y que otros, siguiendo la tradición deAya, podrían entonar las pedreas más largas de lo normal), cabría concluir que la extracción de bolas podría finalizar a las cuatro horas, sobre las 13:00.
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Sin embargo, la lista oficial de premios de la Lotería de Navidad no se recopila hasta unas horas después, pues antes los miembros de las mesas presidenciales deben revisar una vez más - a pesar de haberlo hecho la mesa auxiliar durante la extracción de bolas cada vez que se cerraba una tabla - que los listados informáticos coinciden con las tablas. Acto seguido, un grupo anónimo de catorce personas confecciona una lista de premios desde el Teatro Real para mandársela a la Fábrica de Moneda y Timbre. Si te han parecido pocas las comprobaciones, podrás acudir tú mismo a comprobar tus décimos durante los siguientes siete días al sorteo, ya que las tablas permanecerán entonces en el escenario del Teatro Real. Eso sí, mucho más rápido y cómodo es hacerlo a través del Lotómetro.
Polémica en la Lotería
Habla una mujer con un décimo de Lotería de Navidad que fue cantado, pero no premiado: "No sabíamos qué estaba pasando"
Tania se dio cuenta de que el décimo que habían escuchado cantar a un niño de San Ildefonso no se encontraba reflejado como premiado por la Administración. "Volvimos a casa, vimos la pedrea y en distintos periódicos vimos que estaba premiado", recuerda.