Iba a dejar su actividad en 2030

Elon Musk marca como prioridad viajar a Marte y quiere hacer caer en dos años la Estación Espacial Internacional

Pisa el acelerador El multimillonario quiere desorbitar cuanto antes la ISS para llegar al planeta rojo. Space X, su empres, es quien se encargará de ambas cosas.

Elon MuskElon MuskAgencia EFE

Elon Musk se ha marcado un nuevo objetivo. Un nuevo objetivo que se va a cobrar una 'nueva víctima'. Porque el hombre más rico del mundo, porque uno de los consejeros de mayor confianza de Donald Trump, quiere viajar a Marte. Quiere hacer de dicho cometido su principal meta. Para ello, un adiós. Un adiós que se iba a producir en 2030 pero que él quiere que sea en dos años.

Y ese 'adiós' es el de la Estación Espacial Internacional, o ISS por sus siglas en inglés. Esta infraestructura, que iba a caer en 2030, tiene sus días contados. O, más bien, sus años contados. Porque Musk, porque el dueño de X, quiere que en 2027 esté ya en la Tierra.

Que caiga en un par de años. Todo porque, según él, ya ha "servido a su propósito". Así lo ha hecho saber en su red social. Así lo ha confirmado a la par que comparte que su objetivo es visitar Marte. Que quiere llegar al planeta rojo.

"Es momento de comenzar las preparaciones para desorbitar la ISS. Ha servido a su propósito. Hay muy poco de uso potencial. Vamos a Marte", ha expresado en la red social 'X'.

Casualmente, es Space X, empresa de la que él es el CEO, la encargada de dicho cometido. Así pues, dos y dos han vuelto a dar cuatro y Musk tiene prisa para mandar a tierra la ISS y empezar el proyecto para viajar a Marte.

Porque es él, o su empresa, quien tiene como encargo el construir el vehículo que va a empujar a la ISS a la atmósfera terrestre para que caiga en el Pacífico. En el lugar más alejado posible de cualquier costa.

Además, es también Space X la principal subcontrata que tiene la NASA para lanzar misiones espaciales. Una de ellas es la que, a priori, llevará al ser humano a Marte en el cohete Starship. Y hay más, porque Donald Trump ha propuesto a Jared Isaacman, íntimo de Musk y uno de los principales apoyos del multimillonario en Space X, para dirigir la NASA.