Como en el interior de una nave espacial, brotes de tomateras, lechugas o plantas medicinales crecen en las profundidades del lecho marino: "Hemos cultivado stevia, menta, romero, tomates y verduras", explica Luca Gamberini, director de marketing de 'Ocean Reef Group'.
Lo cuenta uno de los creadores del 'Nemo's Garden', el huerto submarino que cultiva un grupo de buzos en las costas italianas junto a Génova. En unas cápsulas se crean pequeñas biosferas, ecosistemas necesarios para el cultivo de estas plantas: "El cultivo hidropónico es posible en diferentes ambientes externos de la Antártida e incluso en ambientes lunares. ¿Por qué no bajo el agua?", asegura Antonio Ferrante, profesor de ciencias ambientales de la Universidad de Milán.
El sistema que usan desaliniza el agua y aprovecha los recursos naturales del mar. Controlan la temperatura, la presión y la luz que reciben a través de ordenadores y un equipo de buzos se encarga de sembrar y cuidar las plantas germinadas.
Por el momento, aseguran, no es posible sembrar trigo o cultivar árboles frutales pero en los resultados de sus pruebas ya han visto los primeros brotes verdes de romero, tomillo, albahaca, judías y otras legumbres. Y todo esto, sin interferir en el entorno marino: "Es un recurso que seguramente valga la pena usar en el futuro sobre todo porque se usa de manera sostenible", asegura Luca Gamberini,director de marketing de 'Ocean Reef Group'.
Habrá que contemplar si más allá del mar, es posible una agricultura alternativa a la que ya conocemos.
Todo un hito
SpaceX logra atrapar al vuelo el propulsor del Starship por primera vez tras su despegue
En su quinto vuelo de prueba, la compañía lanzó el cohete más grande de la historia y logró recuperar la primera fase del mismo, un hito fundamental en el objetivo de hacer partes reutilizables para futuras misiones.