El verano se acerca a su fin. El equinoccio de otoño se producirá este martes 22 de septiembre a las 15:30:40 horas, según el Instituto Geográfico Nacional (14:30:40 en las Islas Canarias). En ese momento nos despediremos de la época estival y recibiremos a la temporada otoñal.

La palabra'equinoccio' proviene del latín 'aequinoctium', que significa 'noche igual'. Esto se debe a que los dos días del año en que se produce, en primavera y otoño, la duración del día y de la noche es la misma.

Para entender lo que es el equinoccio es indispensable tener claro qué son los solsticios de verano e invierno, momentos clave de la posición de la Tierra para determinar las estaciones.

Solsticios: momentos de máxima inclinación del eje terrestre

Lo que delimita estos cuatro momentos del año es la inclinación del eje de la Tierra respecto al Sol. Durante el solsticio de verano, el eje se encuentra en su máxima inclinación hacia el astro. En el hemisferio norte, este evento se produce en el mes de junio, mientras que en el sur tiene lugar en diciembre. En ese momento el día tiene su máxima exposición a la luz solar, por lo que la noche es la más corta del año.

El solsticio de invierno es el momento opuesto, cuando el eje se encuentra en su punto más alejado de nuestra estrella. Esto provoca que el Sol se vea muy bajo al mediodía, lo que supone día más corto del año. En este caso, se produce en diciembre en el hemisferio norte y en junio en el sur.

Durante los equinoccios, como el de otoño, que se producirá el 22 de septiembre, el eje de la Tierra se encuentra perpendicular al Sol. Esto provoca que el día y la noche duren lo mismo en todas las latitudes terrestres.

Los días cada vez son más cortos

Desde que en junio tuvo lugar el solsticio de verano, y con él, el día más largo del año, la presencia del Sol en el cielo del hemisferio norte ha ido menguando hasta tener el mismo tiempo que la noche. El proceso continúa hasta culminar con el solsticio de invierno, que este año se producirá el 21 de diciembre a las 11:02 horas en el hemisferio norte.

Ese día el eje de la Tierra estará en su punto más alejado del Sol, pero dará paso a un alargamiento de los días que terminará en el solsticio de verano, en junio de 2021.

Aún no hay que cambiar la hora

El cambio horario que se realiza en primavera y otoño no tiene por qué coincidir con los cambios de estación. En la Comunidad Europea, una Directiva del año 2021 estableció el cambio al horario de verano el último fin de semana de marzo, mientras el horario de invierno comienza el último fin de semana de octubre.

Este año, la fecha para introducirnos en el horario invernal es el domingo 25 de octubre, día en que retrasaremos el reloj a las 3 de la madrugada una hora, volviendo a ser las 2. Sin embargo, esta práctica está destinada a extinguirse, ya que el Europarlamento ha marcado 2021 como fecha para que los países miembro decidan qué horario prefieren.

Así, el cambio de octubre podría ser el último hacia el horario de invierno que realicemos en España, si finalmente se decide escoger el horario de verano en nuestro país.