Hubo un tiempo en el que hadas, duendes y gnomos vivieron más allá de la imaginación. Y hay pruebas: dos fotografías de 1917. Son pequeñas hadas mágicas y uno de los primeros fakenews de la historia. ¿El truco? Empecemos por el principio.
Ocurrió en Cottingley. Dos primas británicas de 10 y 16 años, le cogieron la cámara de fotos a su padre y quisieron capturar su encuentro con las hadas. Las fotografías acabaron en los medios de comunicación y revolucionaron a la sociedad.
El pequeño pueblo pasó a convertirse para sus visitantes en la "Tierra de las hadas". Incluso el escritor Arthur Conan Doyle recorrió Reino Unido hablando del poder del mundo espiritual. Envió una cámara a las pequeñas para que pudiesen seguir fotografiando a estos seres sobrenaturales.
NO fue hasta 1981, más de 60 años después, que las niñas confesaron su secreto. Las hadas no eran más que figuras de cartón enganchadas a las plantas con alfileres. Habían conseguido que los ojos de los adultos de todo un país, pudiesen creer en lo imposible. Y por eso dejaron un pequeño espacio a la esperanza: no todas sus hadas eran falsas, su última fotografía, aseguraban, no fue un montaje.