Víctor. G.T., el hombre acusado de amenazar y acosar durante dos años a la ilustradora y escritora Paula Bonet, ha pedido su absolución alegando que padece un trastorno mental "erótico-maníaco" y se ha escudado en que su persecución a la artista era un mero "juego literario". En el juzgado de lo penal número 10 de Barcelona ha quedado visto para sentencia el juicio contra el presunto acosador de la artista, para quien la Fiscalía pide tres años de cárcel y una multa de 4.800 euros por delitos de coacciones y amenazas, además de otro continuado de quebrantamiento de medida cautelar.
La acusación particular ejercida por Bonet pide ocho años de cárcel y una multa de 8.600 euros para el supuesto acosador, que ha estado en prisión preventiva en dos ocasiones por estos hechos y salió el mes pasado, a escasas semanas del juicio, lo que llevó a la artista a anunciar que restringiría su agenda pública para preservar su seguridad. Según mantiene la Fiscalía, desde julio de 2019, el hombre se presentó repetidamente a las puertas del taller de Barcelona en el que trabajaba la artista -donde llegó a pegar los labios y manos en el cristal y a golpearlo con insistencia- y la perseguía en las presentaciones, exposiciones, conciertos y actos públicos a los que acudía.
Posteriormente, añade el ministerio público, le envió correos electrónicos para reclamar su atención y mantener con ella una relación amorosa, le mandó una nota en un sobre con la letra "V" y el texto "el violador" y le dirigió mensajes por Twitter en los que amenazaba con estrangularla y descuartizarla. La defensa del acusado ha pedido su absolución y ha argumentado que V.G.T sufre un trastorno mental "erótico-maníaco" con el fin de que se le rebaje total o parcialmente la pena, lo que ha tratado de avalar con una prueba pericial psicológica de parte.
En su declaración ante el juez, el acusado ha enmarcado su persecución a Bonet en un "juego literario" y una "batalla de gallos" para imponer su "neolenguaje", al tiempo que ha asegurado que la artista le "tiraba el anzuelo" y que se acercó a ella atraído por sus obras y sus postulados feministas. Sobre las amenazas que vertió contra la víctima en Twitter, ha asegurado que esos mensajes eran "bilis negra" de "inspiración sarcástica macabra" debido al "linchamiento" social al que se vio sometido una vez la artista denunció públicamente el presunto acoso que padecía.
El juicio se ha celebrado a puerta cerrada, a petición de la acusación particular ejercida por Bonet, aunque la defensa del acusado ha intentado, sin éxito, que la vista fuera pública y que la artista declarara sin mampara que evitara la confrontación visual con él. Para Carla Vall, abogada de la escritora, el objetivo de esa petición que el juez ha rechazado es "poder intimidar" a la víctima. De hecho, ha añadido, durante el juicio el procesado ha estado mirando "fijamente" en todo momento a la zona donde se encontraba la mujer. La abogada de la acusación, Carla Vall, ha asegurado que el hecho que el acusado se presente "como víctima" es un argumento que suele ser utilizado "por la extrema derecha misógina" y ha destacado que no hay ninguna denuncia por amenazas ni agresión por el presunto "linchamiento" que Víctor G.T. afirma haber padecido. La abogada ha destacado que el acusado tiene abierta otra investigación penal por un caso de presunto acoso a otra mujer muy similar al que padeció Bonet.
