El 25 de junio de 2009 el mundo conocía conmocionado la muerte de Michael Jackson, el llamado "rey del pop", tras sufrir un paro cardiaco en su casa de North Carolwood Drive, situada en el barrio de Holmby Hills de Bel-Air, en Los Ángeles (California).

Conrad Murray, el médico personal del cantante, declaró en un primer momento que había encontrado a Jackson sin respirar en su habitación, con un pulso apenas detectable y que le administró, en vano, reanimación cardiopulmonar. Tras una llamada al 911 a las 12:21 p.m., Michael Jackson fue tratado por paramédicos y, más tarde, se confirmó su fallecimiento en el Ronald Reagan UCLA Medical Center, a donde ya cientos de fans habían acudido y esperaban noticias sobre el estado de salud del cantante.

Fue su hermano, Jermaine Jackson, que quien confirmó de forma oficial la muerte de Michael Jackson, conmocionando al mundo de la música y a millones de fans que le rindieron homenajes a lo largo y ancho del planeta.

Tras el fallecimiento del artista, autor de éxitos emblemáticos como Thriller, Billie Jean o Beat it, la policía inició una investigación, y aunque, en un primer momento, se barajó la hipótesis de una sobredosis de pastillas como causa de la muerte de Jackson, las investigaciones y la autopsia determinaron que el rey del pop había muerto como consecuencia de una intoxicación aguda de propofol y benzodiazepina que le había suministrado el doctor Conrad Murray.

La muerte del Michael Jackson disparó las ventas de sus discos y también las del grupo del que había formado parte con sus hermanos, los Jackson 5. Dejó a miles de fans sin poder asistir a la que sería la última gira de conciertos del cantante, This is it y alimentó la leyenda del excéntrico artista.

*Archivo: laSexta está rememorando aniversarios de acontecimientos históricos o episodios relevantes cubiertos por la cadena.