La policía austríaca detuvo este miércoles a dos presuntos terroristas que planeaban atentar durante los conciertos de Taylor Swift en Viena, programados del 8 al 10 de agosto, y en otros eventos de la ciudad, informó el director general de Seguridad Pública de Austria, Franz Ruf. Ruf confirmó, en conferencia de prensa, el arresto de un ciudadano austríaco de 19 años en la localidad de Ternitz, a unos 65 kilómetros al suroeste de Viena, y de una segunda persona detenida en la capital.
El joven arrestado en Ternitz se radicalizó a través de Internet y prestó un "juramento de lealtad al Estado Islámico (EI)" en julio, detallaron las autoridades, que encontraron sustancias químicas en su residencia, que aún están siendo evaluadas. De acuerdo con las autoridades, los acusados habían realizado preparativos concretos para llevar a cabo un atentado terrorista, como indican los objetos hallados en el domicilio de Ternitz, donde la búsqueda aún sigue en curso.
Tras conocerse estas detenciones, la promotora de los conciertos ha anunciado que las tres actuaciones previstas de Taylor Swift en Viena han sido canceladas. "Con la confirmación de los funcionarios del gobierno de un ataque terrorista planeado en el estadio Ernst Happel, no tenemos más opción que cancelar los tres espectáculos programados por la seguridad de todos", dijo Barracuda.music en una publicación en Instagram, agregando que todas las entradas serían reembolsadas automáticamente.
"Hemos detectado preparativos específicos para los conciertos de Taylor Swift", señaló Ruf, y avanzó el refuerzo de las medidas de seguridad en los controles de acceso y las cercanías durante los tres días consecutivos del espectáculo, del jueves al sábado. En concreto, tenían previsto desplegar unidades especiales que incluyen, entre otros, personal encubierto, unidades caninas, y la intervención de la unidad Cobra, la principal unidad táctica de operaciones especiales antiterroristas en Austria.
"Se han reforzado las medidas de seguridad para los conciertos de Taylor Swift poniendo especial énfasis en los controles de acceso y la inspección de personas", remarcó Ruf. Se espera la asistencia de unos 65.000 espectadores por día, con entre 15.000 y 20.000 personas adicionales en las cercanías del estadio Ernst-Happel, dijo en la conferencia de prensa el director de la Policía estatal de Viena, Gerhard Pürstl. Dada la alta afluencia, se implementarán controles más rigurosos en los accesos, lo que podría conllevar a posibles retrasos en la entrada de los asistentes, explicaron ante los medios.
"La policía de Viena tomará todas las medidas necesarias para garantizar la seguridad del evento", advertía Pürstl, añadiendo que, aunque la amenaza concreta se ha minimizado, se mantienen en alerta. La operación antiterrorista comenzó en la mañana del miércoles en Ternitz y duró varias horas, durante las cuales se evacuó una residencia de ancianos y otros edificios, y se establecieron controles en la carretera, informa la agencia austríaca de noticias APA.
Viena fue blanco de un atentado terrorista en noviembre de 2020, en el que fallecieron cuatro personas. En diciembre pasado, las autoridades detuvieron a cuatro sospechosos de planear un ataque en la catedral de San Esteban, en el centro de la ciudad.