El artista Nacho Cano no da marcha atrás y repite que su detención por la posible contratación fraudulenta de becarios mexicanos para el musical 'Malinche' responde a una cacería política. En el comunicado que lanzó hace unas horas, el productor musical decía que existen "policías buenos y malos", y que a él le han tocado los malos, tal y como ha señalado el periodista de laSexta Javier Bastida.
Para Cano, esto es una maniobra de distracción para tapar la actualidad política. "Si tú metes a 17 chicos en una comisaría y les coaccionas, e intentas sacar una información que no es verdad, y construyes un relato...", denunció el artista en 'Espejo Público', tras lo que se refirió a los agentes que interrogaron a los becarios como "chulos".
En lo referente a los becarios, se trata de 18 jóvenes que vinieron desde México el pasado mes de diciembre. Todos le han defendido, salvo una, que fue la que denunció. El resto asegura que nunca han cobrado en 'b', e insisten en que para ellos, estar en España es un "honor", porque siguen los consejos del "maestro" Nacho Cano.
"Cuando expresamos que no nos sentíamos identificados con la situación que teníamos que firmar, nos dijeron que esa era nuestra única salvación; que ellos lo que hacían era apoyarnos, porque estábamos de ilegales en este país", expresó una de las becarias a laSexta sobre los agentes que hablaron con ellos en comisaría.
Eran conocidos como los 'caras rotas'
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Los conocidos como 'caras rotas' eran despreciados por la sociedad, como se narra en El reconstructor de caras. Solo algunos, gracias al cirujano Harold Gillies, vivieron una segunda oportunidad.