Comienzan a conocerse detalles de la intrahistoria del rodaje de 'Rust', marcado por ese trágico accidente que acabó con Alec Baldwin matando accidentalmente a la directora de fotografía del largometraje.
Según publica 'Los Angeles Times', horas antes de que tuviesen lugar esos disparos accidentales, media docena de miembros del equipo de cámaras se marcharon del plató como protesta por las condiciones laborales del rodaje.
Según detalla el medio, los miembros del equipo estaban frustrados por estar sometidos a jornadas laborales inacabables, largos desplazamientos y sufrir retrasos en los pagos de sus nóminas. Estas mismas fuentes confirman que los protocolos de seguridad no se siguieron de forma estricta en el set de 'Rust', cerca de Santa Fe, con la queja de un gerente de producción relacionada con la seguridad de las armas en el set.
Tres miembros de ese 'staff' se mostraron preocupados por dos descargas accidentales de un arma. Antes de efectuar los fatales disparos, Alec Baldwin fue avisado de que el arma estaba 'fría', es decir, que no tenía munición de ningún tipo, ni real ni de fogueo.
"No hubo reuniones de seguridad. No había ninguna garantía de que no volvería a suceder. Todo lo que querían hacer era correr, correr y correr", relata un miembro del rodaje al citado medio. Un mensaje de texto de otro trabajador hablaba del clima "muy inseguro" que reinaba en ese set, algo que desde Rust Movie Productions han negado en un comunicado.
"La seguridad de nuestro equipo es la principal prioridad de Rust Productions y de todos los asociados con la empresa. Realizaremos una revisión interna de nuestros procedimientos mientras se cierra la producción y continuaremos cooperando con las autoridades de Santa Fe en su investigación y ofreciendo servicios de salud mental al equipo durante este trágico momento", explican.
Eran conocidos como los 'caras rotas'
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