Cintura de avispa, curvas imposibles... ¿Quién no desearía un cuerpo así? Aunque a primera vista parezca maravilloso, no lo es si para conseguirlo es necesario utilizar corsé. Una prenda del siglo XVI que se usaba para ceñir el cuerpo femenino. Ha sido la base de la lencería, un reclamo de muchos diseñadores de moda.
Sin embargo, el corsé también es un signo de opresión a la mujer. Emma Stone ha sido una de las últimas actrices que ha sufrido esta prenda. Grabar 'La favorita' ha sido la experiencia más dolorosa de su carrera. Sus órganos se recolocaron por utilizar corsé durante tantas horas de grabación.
Nicole Kidman llegó a sufrir un desmayo por falta de aire en pleno rodaje de 'Retrato de una dama'. En 'Moulin Rouge' se rompió una costilla por cómo le apretaron la prenda. Por eso, Emma Watson se negó rotundamente a utilizarlo en 'La Bella y la Bestia'.